Jerusalén.

El gobierno israelí comenzó a construir una barrera subterránea de unos 70 kilómetros de largo en la frontera con Gaza para impedir que milicianos de Hamas entren a Israel a través de túneles, afirmaron funcionarios israelíes de Defensa este jueves.

El proyecto es el aspecto principal de un monumental esfuerzo israelí para detener los túneles de Hamas que los milicianos emplean para atacar a israelíes.

Durante una guerra en 2014, los milicianos lograron entrar a Israel en varias ocasiones, aunque no llegaron a las zonas civiles.

Israel destruyó 32 túneles durante ese conflicto y desde entonces no sólo los ha destruido, sino ha rodeado Gaza con una cerca dotada de sensores, cámaras, alambre de púas y torres de vigía.

La barrera de concreto estará a decenas de metros de profundidad y costará unos 160 millones de dólares.

Salah Bardawil, alto funcionario de Hamas en Gaza, afirmó que la barrera subterránea no detendrá al grupo: El pueblo palestino y la resistencia pueden superar todos los obstáculos creados por la ocupación. La resistencia es creativa y avanzada y no le importan las obras de la ocupación.

Por otra parte, la cancillería rusa anunció este jueves que los jefes de gobierno de Israel, Benjamin Netanyahu, y de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, acordaron en principio reunirse en Moscú en el momento adecuado para negociaciones que los rusos esperan permitan reanudar las conversaciones de paz en Medio Oriente después de una interrupción de dos años.