El precio de los alimentos en el mundo alcanzaron durante agosto su nivel más alto en los pasados 15 meses; es decir, desde mayo de 2015. Azúcar, productos lácteos y aceites vegetales subieron, advirtió la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Los alimentos se encarecieron 7 por ciento el mes pasado en comparación con agosto de 2015 y 1.9 por ciento respecto de julio, a pesar de que bajaron los precios de los principales cereales; es decir, maíz, trigo y arroz, porque mejoraron las perspectivas de producción para lo que resta de 2016, explicó la FAO al dar a conocer su más reciente índice de precios.

Las tendencias de los precios retoman su camino ascendente, indicó. El azúcar acumula un encarecimiento anual de 75 por ciento, en tanto que los aceites vegetales y los productos lácteos subieron 25 y 14 por ciento, respectivamente, en los pasados 12 meses. Por el contrario, la carne se redujo 5 por ciento en el último año, pero subió 0.3 por ciento respecto de julio, en tanto los cereales se abarataron 3 por ciento en un mes y hasta 7.4 por ciento en su comparativo anual.

La FAO destacó que el azúcar alcanzó su nivel más alto en casi seis años, es decir, 2.5 por ciento más en relación con julio, pero hasta 75 por ciento en términos anuales. Explicó que el fortalecimiento de la moneda de Brasil, el mayor productor mundial de caña, impulsó gran parte del aumento, ya que limitó la oferta para la exportación, pues los productores prefieren vender en los mercados locales, debido a que durante agosto el real se apreció otro 2 por ciento frente al dólar.

Además existe una previsión de que haya déficit mundial del edulcorante para el siguiente ciclo agrícola y una reducción de las existencias de Asia.

Al explicar el alza de los productos lácteos (8.6 por ciento en un mes y 14 por ciento en el último año), la FAO detalló que subieron en particular el queso, la leche entera en polvo y la manteca... Esto confirma un cambio notable en la actitud del mercado ligada a la caída de la producción de leche en la Unión Europea y una reducción de las perspectivas de la oferta para la exportación tras un inicio nada excepcional de la temporada anual en Oceanía.

En cuanto a los aceites vegetales, el incremento fue de 7.4 por ciento en un mes, pero hasta 25 por ciento en el año, impulsado por el aceite de palma porque en Malasia hubo una producción menor a la prevista y creció la demanda de China, India y la UE. Con ello, puntualizó el organismo, se invirtió la disminución de precios de los pasados tres meses.

Respecto a la carne, los precios se mantuvieron casi estables pues sólo se incrementaron 0.3 por ciento en relación con julio e incluso bajó la carne de bovino, y en el año se abarató 5 por ciento. En este caso la FAO lo atribuyó a la abundancia de cereales secundarios destinados al ganado que sirvió para que se recuperara Estados Unidos.