En México 60 por ciento de quienes tienen entre 20 y 59 años de edad no cuentan con el cuadro completo de vacunas. Se trata de la brecha más amplia en la población, por lo cual médicos especialistas crearon el primer Consenso mexicano de vacunación en adultos, el cual presentaron ayer.

La iniciativa, encabezada por el Instituto Nacional de Geriatría (Inger), busca fomentar la aplicación en los mexicanos de mediana edad para que logren una vejez saludable. Asimismo, educar al personal de salud, pues no siempre está consciente de los beneficios que trae a sus pacientes, dijeron.

Sabemos mucho de vacunación en niños, pero poco de adultos, reconoció, en conferencia de prensa, la especialista en enfermedades infecciosas Martha Cecilia Guerrero Almeida. En el transcurso de la vida es necesario volver a recibir vacunas, pues las defensas ante diferentes enfermedades pueden debilitarse o bien perderse, explicó.

Las vacunas disminuyen la mortalidad por enfermedades infecciosas prevenibles, como la influenza y la neumonía, señaló Luis Miguel Gutiérrez Robledo, director general del Inger. Asimismo, reducen la probabilidad del uso de antibióticos y de ser hospitalizado y, en general, mejoran la calidad de vida, apuntó el funcionario.

A pesar de lo anterior, se asocia con la infancia, lamentó, y ese concepto no es sólo entre la población, sino en el personal médico y de enfermería, quienes muchas veces tampoco se vacunan, agregó. Por ello, con el consenso que este año realizaron más de 100 médicos de diferentes especialidades, esperan difundir la información en esos sectores.

Una de las razones por las que los adultos no se vacunan, aseveró Flor de María Ávila Fematt, directora de enseñanza y divulgación del Inger, es que los médicos no los invitamos a que lo hagan.

De acuerdo con Guerrero Almeida, los adultos deben vacunarse contra la difteria, tosferina, tétanos –sin esperar a causarse una laceración que lo amerite–, hepatitis B, herpes zóster, influenza –es de cajón–, paperas, sarampión, rubéola, virus del papiloma humano y varicela.

Sin embargo, el antígeno para esta última nunca ha estado en el esquema gratuito. Para la población de entre 20 y 50 años el sector salud ofrece el del tétanos, difteria, sarampión, paperas y rubéola, afirmó.