Cultura
Ver día anteriorViernes 12 de agosto de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Rafael Tovar inauguró exposición en el Palacio de Bellas Artes

Toulouse-Lautrec plasmó las transgresiones de la Belle Époque
Foto
Al centro, Rafael Tovar y de Teresa y María Cristina García Cepeda en la inauguración de la muestra El París de Toulouse-Lautrec: impresos y carteles del MoMAFoto Arturo López/ Secretaría de Cultura federal
 
Periódico La Jornada
Viernes 12 de agosto de 2016, p. a12

La exposición El París de Toulouse-Lautrec: impresos y carteles del Museo de Arte Moderno de Nueva York documenta ese lado oscuro o alegre de la Belle Époque de la capital francesa, de las transgresiones sociales de ese momento, dijo el titular de la Secretaría de Cultura federal, Rafael Tovar y de Teresa, durante la inauguración de esa muestra que ocupa dos salas del Museo del Palacio de Bellas Artes.

Acompañado por la coordinadora adjunta de planeación administración y exposiciones del MoMA, Rachel Kim, Tovar agradeció al recinto neoyorquino el préstamo de esas piezas “que dan cuenta de todo un periodo de su obra que se concentra básicamente en la parte de la gráfica.

“En otros artistas –dijo el funcionario– una exposición de gráfica sin óleos desmerecería la relevancia de ésta; en el caso de Toulouse-Lautrec esto no es posible, sino al contrario, subraya su importancia porque fue probablemente el medio que utilizó más en sus distintas acepciones: gráfica, lo que hoy se conoce como póster, para mostrar el lado oscuro o alegre, como lo queramos ver, de las noches intensas de la Belle Époque parisina”.

Gracias a esa obra podemos ver rostros, gestos, que era lo que más le interesaba, los momentos que captaba en una determinada circunstancia y a una enorme velocidad y memoria fotográfica, por la que era famoso; la plasmaba en dibujos que dejaba en las mesas de lugares como el Moulin Rouge o el Folies Bergère y otros tantos cabarets donde se juntaba la prostitución, el alcohol, los goces de una sociedad que estaba abriéndose a nuevas costumbres. Esto llamaba su atención, esas transgresiones en las que buscó plasmar plenamente en su obra.

La muestra ocupa las salas Paul Westheim y Justino Fernández del Museo del Palacio de Bellas Artes (Juárez, esquina y Eje Central, Centro Histórico). Concluirá el 27 de noviembre.