Mundo
Ver día anteriorMartes 5 de julio de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Se prepara Cristina Fernández para enfrentar proceso judicial

Encapuchados destruyen instalaciones del periódico Tiempo Argentino
Foto
Computadoras y archivos, entre lo destrozado por el grupoFoto Ap
Corresponsal
Periódico La Jornada
Martes 5 de julio de 2016, p. 20

Buenos Aires.

La madrugada de este lunes, un grupo de encapuchados, tipo comando, asaltó la redacción del diario Tiempo Argentino, editado por una cooperativa de periodistas, que recuperaron este medio y con extrema violencia destruyeron computadoras, equipos y archivos, amparados por policías que supuestamente cuidaban el lugar, en una acción de extrema gravedad.

En conferencia de prensa, el presidente de la cooperativa de Tiempo, Javier Borelli, junto a delegados del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) relató que pudimos volver al edificio donde estamos trabajando y sacando el diario a la calle.

Durante el intento de desalojo, los encapuchados destruyeron el mobiliario y violentaron los sistemas de comunicación. Los lugares más afectados fueron la oficina del sistemas, fueron a romper la conexión, cortaron los cables de red, además de otras roturas de vidrios y mobiliarios, contó el titular de la cooperativa que fundaron los trabajadores y que en marzo pasado sacaron el periódico en edición dominical.

La reacción de un funcionario de la alcaldía de Buenos Aires, en manos de la derechista Propuesta Republicana,Yamil Santoro, quien consideró que se trataba de un asunto entre privados, produjo un fuerte rechazo en diversos sectores.

Regreso de la ex presidenta

En este marco de una situación que se agrava cada día, la noche del domingo llegó desde la provincia sureña de Santa Cruz, la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien fue recibida en el aeropuerto porteño por miles de manifestantes, como sucedió en su primer viaje a esta capital, para responder ante el juzgado del polémico juez Claudio Bonadío, que mantiene una persecución judicial contra la ex mandataria, sin pruebas, desde que estaba en el gobierno.

Este juez que acumula más de 200 denuncias por diversos delitos y es protegido por el gobierno de su sucesor, el empresario Mauricio Macri, presiona a su vez a ex funcionarios del anterior gobierno para que acusen a la ex mandataria, como ha sido denunciado aquí.

En este escenario cada vez más complicado donde la justicia ha determinado en varias provincias amparar a los ciudadanos contra el aumento de tarifas de servicios públicos que suman entre 400 y mil 500 por ciento, imposibles de pagar, la llegada de la ex mandataria volvió a crear esperanzas.

La ex mandataria está sometida a una verdadera persecución política y judicial. Consideró que las acusaciones en su contra tienen motivaciones políticas. Yo no siento que soy perseguida. Lo soy, dijo en entrevista telefónica con el programa Política Económica del periodista Roberto Navarro.

Es disparatado hablar alegremente de sobreprecios en los contratos de su gestión, afirmó y anunció que pedirá la auditoría en la justicia para saber qué pasó exactamente. Si representás los intereses de las minorías, nunca te va a pasar nada, señaló. Denunció que las acusaciones judiciales y mediáticas en su contra tienen como trasfondo las políticas que llevó adelante durante su gestión. Si representás los intereses de las minorías, nunca te va a pasar nada.

efiniciones criticó al gobierno de Macri por el ajuste brutal que lleva adelante. Su discurso fue calmo y mantuvo una posición firme frente a todo lo que está sucediendo. Es claro y es evidente que soy perseguida. Debo ser la única persona que es investigada por dos jueces de Comodoro Py por la misma causa y con el mismo objeto, reiteró.

Esto de decir alegremente que hubo sobreprecios en la obra pública es disparatado. Estamos hablando de un plan de obra pública de miles de millones de dólares ejecutada por el gobierno nacional, pero también por gobernadores e intendentes, indicó la ex presidenta recordando que 60 por ciento de la obra pública era descentralizada.