La media noche del 26 de septiembre de 2014, estudiantes de la normal de Ayotzinapa fueron agredidos a tiros por un grupo de sicarios, cuando se preparaban para dar una conferencia de prensa en torno a la sucedido en Iguala momentos antes; después se sabría que 43 de sus compañeros fueron privados de su libertad.

Los normalistas corrieron a esconderse, algunos detrás de coches; otros tocaron en domicilios cercanos pidiendo auxilio, pero Julio César Mondragón fue perseguido y cercado por integrantes de Guerreros Unidos cuando huía.

De acuerdo con el informe de la Procuraduría General de la República (PGR) del caso Iguala, Gildardo López, El Gil, jefe de plaza de Guerreros Unidos, declaró al Ministerio Público Federal que su compadre y dos integrantes más de esa organización apedrearon al normalista hasta matarlo porque no quiso detener la huida.

En el documento señala, según la declaración del estudiante 24, rendida el 17 de julio de 2015 ante la PGR, que pudo observarse: [...] como a las cero horas llegaron los compañeros de la normal, la prensa, y muchas personas preguntando que qué había pasado, y una camioneta con hombres armados abrió fuego contra quienes se encontraban en el lugar para la conferencia de prensa.

El estudiante 37 en su declaración rendida en la misma fecha manifestó: [...] pasó la camioneta y nos volvimos a levantar y fue cuando vimos a mi compañero (Julio César), quien se había escondido detrás de un coche, por lo que él corrió hacia la esquina de la calle al parecer Juárez y nosotros nos metimos a una casa donde un señor nos abrió la puerta después de rogarle, por lo que le gritamos a (Julio César) que fuera adonde estábamos, quien nos vio pero no nos hizo caso, ya que corrió hacia debajo de la calle Juárez, sin saber nada de él.

En ese contexto, Gildardo López Astudillo declaró el 17 de septiembre de 2015 “que el indiciado 18 (del cual no se revela su nombre) fue quien presuntamente privó de la libertad y de la vida al estudiante que apareció desollado en una calle de Iguala; que lo había hecho junto con su compadre, el indiciado 27 y el indicado 28; que el muchacho se había separado del grupo y que lo habían acorralado cerca del domicilio del citado indiciado 18.

“El indiciado 18, según declaró El Gil, dijo que lo habían correteado pero como no se quería parar lo empezaron a apedrear hasta matarlo y enseguida lo desollaron y fueron a tirar su cadáver a un camino de terracería con la ayuda de David Hernández Cruz, (un integrante) de Protección Civil (del municipio de Iguala)”, señala el informe de la PGR.