Con dos horas de suministro de agua por la mañana y una por la noche viven desde hace 12 años habitantes del conjunto habitacional Clavijero, en la colonia La Esperanza, donde las tomas instaladas resultan insuficientes para abastecer el líquido a sus inquilinos. Aún así, en los alrededores continúa la construcción de desarrollos inmobiliarios.

Aquí nunca hemos sabido lo que es vivir con agua todo el día. Si queremos bañarnos en la regadera tenemos que levantarnos entre las cinco y las siete de la mañana, si no, después a jicarazos con la que se recolecta para limpiar el baño, cocinar y lavar los trastes. En las noches, si queremos salir no podemos porque tenemos que llenar nuestros tambos, relató la señora Socorro Elizarrarás, de 66 años de edad.

Con ella coincide Nadia Castañeda, también vecina, quien detalló que tiene que adecuar sus actividades a las horas en las que cae el líquido. Del trabajo todo mundo llega corriendo en la noche a lavar la ropa, para aprovechar la hora en la que está cayendo el agua, apuntó.

Juan Chávez, habitante del lugar, explicó que el conjunto habitacional, que alberga 232 departamentos en 11 edificios, lo construyó la inmobiliaria Demet en terrenos donde había una fábrica de helados, con una tubería de diámetro menor al que se requiere para abastecer a los condominios.

La empresa debió haber previsto eso y ampliar la red para dar el servicio de manera regular, pero nos timó, con la complicidad de las autoridades que permitieron que se ocuparan los edificios con esta falla, refirió, y detalló que las viviendas son de interés social y fueron adquiridas con créditos del Infonavit, que aún siguen pagando.

Al principio, relataron los vecinos, el suministro de agua eran de tres horas por la mañana y tres por la tarde, pero a últimas fechas este horario se redujo a la mitad. En el centro del conjunto habitacional se encuentra la cisterna que durante el día y la noche es llenada con mangueras de la red exterior para dotar del líquido a los poco más de mil inquilinos.

Ayer se quedaron esperando al personal del Sistema de Aguas de la Ciudad de México y de la delegación Cuauhtémoc, que se había comprometido a revisar la red hidráulica para ver las alternativas de solución, pero nunca llegaron.

Ya metimos escritos y nos traen a las largas, el recibo llega puntual cada dos meses, pero no resuelven el problema, expusieron, y advirtieron que de no ser tomados en cuenta saldrán a bloquear las calles para que sea atendida su demanda de agua.