Más que una disculpa de la refresquera Coca-Cola, queremos que garantice que no volverá a discriminar a los pueblos indígenas en su publicidad, indicó ayer Elvira Pablo Antonio, integrante de Aser Litigio, una de las organizaciones que denunciaron el racismo de un comercial grabado en el poblado mixe de Totontepec, Oaxaca.

Informó que, junto con otros activistas de la Alianza por la Salud Alimentaria y del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, sostendrán una reunión con funcionarios del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), en la cual solicitarán nuevamente que atraigan ese caso.

El pasado jueves el director de publicidad de la trasnacional se disculpó en una entrevista radiofónica por el comercial que difundieron en redes sociales. Se trata de un video –que ya eliminaron de sus cuentas– en el que jóvenes blancos elaboran un árbol de Navidad en Totontepec ante la expectativa de los pobladores, que no intervienen en la acción.

El directivo lamentó que se malinterpretara el mensaje que querían enviar, el cual, aseguró, era de unión entre las comunidades.

Algunas personas me han dicho que no entienden de qué manera es discriminatorio para la comunidad de Tontontepec, pero no se trata sólo de ese lugar, sino en general de los pueblos indígenas, pues se refuerzan ideas preconcebidas de asistencialismo, por ejemplo, explicó. Otras personas, en este caso un grupo de jóvenes citadinos, quienes nos llevan la felicidad, mientras nosotros sólo miramos y recibimos.

La activista mixe se pronunció por que se otorgue más facultades al Conapred para que pueda efectivamente prevenir las expresiones de exclusión.