El Instituto Nacional Electoral (INE) va en contrasentido con el principio de austeridad al pretender gastar millones de pesos en grandes oficinas para las altas jerarquías; además, no debe asignarle a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) la construcción de sus dos nuevas torres, porque no está dentro de sus funciones ser contratista, señalaron PAN, Morena y PRD.

Sólo el diputado del PRI Jorge Carlos Ramírez Marín defendió la labor del Ejército como constructor, porque es garantía de rapidez y de estricto apego al presupuesto.

La Jornada publicó ayer que los altos mandos del INE serán consentidos con oficinas mucho más amplias con vista panorámica y que el plan para que la Sedena construya sigue en pie, pero se tambalea debido a una serie de observaciones efectuadas por la Auditoría Superior a la Federación (ASF) por un edificio para el Consejo de la Judicatura Federal ubicado en Oaxaca.

Horacio Duarte, representante de Morena, calificó de primer error la construcción de estas dos torres de 14 pisos y como un segundo yerro que se pretenda asignar a la alta burocracia del INE oficinas ejecutivas que son un contrasentido al principio de austeridad.

Es una verdadera vergüenza y capricho. Resulta que por cada metro cuadrado hay un punto de imparcialidad del órgano electoral, comentó con ironía.

Planteó que el INE tiene que licitar este proyecto y no dárselo automáticamente a la Sedena. Primero lo hicieron policía para el tema narcotráfico; como no sirvió le dieron paso a la Secretaría de Marina y ahora quieren meterlo como constructor de edificios públicos. Me parece una forma de degradar a una institución del Estado mexicano. Darle función de constructor o albañil no es lo correcto.

El representante del PRD, Pablo Gómez, planteó: La naturaleza del Ejército no es ser contratado por nadie; está constituido para otra cosa y dijo que en todo caso habrá que preguntarle al secretario ejecutivo, Edmundo Jacobo, si la Sedena es contratista legalmente constituido.

“No creo que el Ejército sea y pueda ser contratista. El tema es político concerniente a la administración pública y si México va a tener tropas que se dediquen al contratismo en la industria de la construcción.

Sobre las amplias oficinas que se propone edificar para las altas jerarquías del INE, indicó que no le queda claro lo que se quiere hacer. Mejor que termine los edificios que está haciendo y no empiece otros que se pueden tardar los años y los años.

Francisco Gárate, representante del PAN, señaló que las instituciones públicas deben tener instalaciones dignas, pero austeras.

Y señaló que el Ejército no tiene entre sus funciones hacer edificios.

“Resulta que a los soldados los tienen en funciones de seguridad nacional, después en tareas de protección pública y para, rematar los ponen de albañiles.

Ramírez Marín calificó de buena idea del INE, aunque dijo que aparte de eso no pueden desatenderse las observaciones de la ASF, que en ningún caso ha dicho que no construya la Sedena, sino que cumpla ciertas condiciones.