Organizaciones ambientalistas, campesinas, civiles y religiosas convocan a participar este domingo en la Marcha Global por el Clima, que se realizará en más de 150 ciudades del mundo, en el contexto de la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21), que se realizará en París, Francia, del 30 de noviembre al 11 de diciembre.

Indicaron que demandarán a los gobiernos asistentes a la COP21 alcanzar acuerdos para aplicar medidas no sólo de mitigación, sino de transformación de un modelo económico que privilegia el derroche, la explotación, la desigualdad y el consumo desmedido.

En conferencia de prensa, integrantes de diversos colectivos, entre ellos Sin Maíz No hay País, Cáritas Mexicana, Centro de Estudios Ecuménicos, Iglesia Anglicana de México y Acción 2015, alertaron que el gobierno mexicano no ha sido claro sobre la agenda que llevará a la COP21 y la postura que asumirá sobre temas prioritarios, como los bonos de carbono.

José Martín Velázquez, de Sin Maíz No hay País, agregó que también resultan muy preocupantes los indicios de que el llamado Fondo Verde, que se integra con recursos públicos de los Estados, quedará en manos del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional.

En tanto, la Comisión Episcopal para la Pastoral Social de la Conferencia del Episcopado Mexicano y Cáritas Mexicana llamaron a católicos y a todos los cristianos en general, así como a aquellos que no profesan creencia alguna, a sumarse a esta marcha, que partirá este domingo a las 11 horas del Monumento a la Revolución.

Señalaron que la caminata pretende llamar la atención de los gobiernos y líderes del mundo, pero especialmente del gobierno mexicano, para que además de su compromiso de reducir la emisión de gases de efecto invernadero para 2026, explore otras alternativas que permitan transformar esa visión de desarrollo económico en una de desarrollo humano integral y solidario, en el cual las personas sean el centro.

La CEPS recordó que el papa Francisco, en su encíclica Laudato Si’ alerta sobre la posibilidad no sólo de terribles fenómenos climáticos, sino también de “catástrofes derivadas de crisis sociales, porque la obsesión por un estilo de vida consumista, sobre todo cuando sólo unos pocos puedan sostenerlo, únicamente provocará violencia y destrucción recíproca.