‘‘En México existe una violación generalizada de los derechos humanos’’, aseveró el obispo de Saltillo, Raúl Vera López, quien criticó que ante los señalamientos de organismos internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el gobierno niegue la situación.

‘‘Esto lo han dicho en visita el presidente del Comité Contra la Tortura (de la ONU), (Fernando Mariño) Menéndez, y ha sido denostado. Viene la CIDH a dar el primer resultado de sus investigaciones en el caso Ayotzinapa y ahí van las críticas; sus representantes acuden a escuchar a los grupos defensores de derechos humanos, y surge otra vez la descalificación de parte del Estado queriendo justificar y negando la observación internacional”.

En conferencia de prensa, el obispo informó que la organización de derechos humanos Red Solidaria, Década contra la Impunidad, la cual preside, se reunió el 28 de septiembre con el Equipo de Ejecuciones Extrajudiciales, dependiente de la Organización de Naciones Unidas en Ginebra, para entregar a dicho organismo insumos de los casos de las ejecuciones extrajudiciales en contra de Armando Chavarría Barrera y de la masacre de El Charco.

Vera López señaló que ante dicho organismo también denunciaron que ‘‘en México la militarización y la violencia son un medio de control del Estado en contra de la población; decirlo, es una forma de contención en contra de todas las injusticias que se están cometiendo con la aplicación del modelo económico neoliberal, especialmente a partir del Tratado de Libre Comercio de América del Norte’’.

Vera y su equipo, formado por los abogados Ernesto Rodríguez Cabrera y Deeni Rodríguez López, así como el sobreviviente de la matanza de El Charco Efrén Cortez Chávez, se reunieron en París con las organizaciones France Libertés-Fondation, Danielle Mitterrand, la junta directiva del Comité Católico contra el Hambre y a Favor del Desarrollo, Amnistía Internacional de Francia y con integrantes del Partido Comunista francés, entre otros.

El religioso aseveró que en el país también se vive en un contexto de ‘‘impunidad y criminalización de la lucha por los derechos humanos’’ y lamentó que ‘‘en estos días ya se haya liberado a cuatro soldados’’ relacionados con el caso Tlatlaya.