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Miles asistieron a las primeras horas del maratón en Bellas Artes para despedir la muestra

Mañana concluye Leonardo da Vinci y la idea de la belleza

Entre las 22 horas del viernes y las 8 horas del sábado ingresaron alrededor de 5 mil 40 personas

La Exposición de Miguel Ángel Buonarroti permanecerá hasta el 27 de septiembre

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El Palacio de Bellas Artes, ayer. En la imagen inferior, largas filas en la explanada a las cinco de la madrugadaFoto María Luisa Severiano y Pablo Espinosa
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Largas filas en la explanada a las cinco de la madrugadaFoto María Luisa Severiano y Pablo Espinosa
 
Periódico La Jornada
Domingo 23 de agosto de 2015, p. 2

La noche de este viernes los visitantes al Palacio de Bellas Artes se contaron por miles. Es el último fin de semana de la exposición de Leonardo da Vinci, motivo por el cual se organizó un maratón de 72 horas para que sea visitada por la mayor cantidad de personas.

Entre las 22 horas del viernes y las 8 horas del sábado ingresaron alrededor de 5 mil 40 personas.

La entrada por grupos, cada media hora, transcurrió sin incidentes. Los primeros 210 que compraron sus boletos en el sistema Ticketmaster llegaron con anticipación.

En las inmediaciones del recinto se contó con el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública para garantizar la integridad del público que hizo largas filas desde las cinco de la mañana.

En familia, en grupos de amigos, parejas o en solitario, miles de personas visitaron ayer el Museo del Palacio de Bellas Artes para despedir la exposición de Leonardo da Vinci y la idea de la belleza, mientras Miguel Ángel Buonarroti: un artista entre dos mundos permanecerá unas semanas más.

Según datos del recinto, hasta las ocho de la mañana de ayer se tenía registrada una afluencia total de 268 mil personas, de las cuales 53 por ciento visitó por primera vez el museo en los 12 meses recientes. También se informó que 57 por ciento de los asistentes son menores de 25 años.

Como el primer día de su exhibición, el pasado 26 de junio, los visitantes llegaron desde la madrugada para comprar en la taquilla un boleto y acceder a las exposiciones.

Las largas filas se extendieron por la explanada del máximo recinto cultural hasta la avenida Hidalgo, y dieron vuelta hacia la Alameda. Los afortunados que llegaron antes de las 7 horas todavía alcanzaron uno de los 6 mil boletos para ingresar en los horarios de 8 a 10 de la noche, ya que los del horario nocturno se vendieron sólo en Ticketmaster.

A las 11 horas ya se habían agotado los boletos en taquilla y la confusión surgió en la gente que se encontraba formada, pues se corrió el rumor de que a las 24 horas se comenzaría a repartir las cortesías para entrar al museo el domingo, día de entrada libre.

Personas de la tercera edad también se quedaron sin entrar, como la señora Georgina Mesa, quien llegó sola a las 7 de la mañana y ya no alcanzó boleto. Expresó a este diario que nadie le explicó que había una fila diferente para estudiantes y adultos mayores.

A diferencia de Mesa, el señor Jesús Galicia, de 79 años, llegó también a las siete de la mañana y entró a ver las exposiciones a las 10:30 horas. Salió después del mediodía y entusiasmado compartió que le gustaron mucho las exhibiciones. Todo me gustó, vale la pena formarse, porque no los tenemos todos los días. Sólo me hubiera gustado que hubiera más luz en las salas para leer la información de los artistas, pero me pareció muy interesante, indicó Galicia.

Otros afortunados que consiguieron boletos para ver las 15 piezas originales de Leonardo da Vinci, como el Códice sobre el vuelo de las aves, fueron los integrantes de la familia Pacheco Anaya, quienes después de dos intentos por adquirir sus entradas, finalmente este sábado alcanzaron boletos.

Mientras muchas personas con la desilusión en el rostro no sabían si quedarse en la fila hasta la media noche para tener una cortesía y entrar el domingo al museo, la joven Karen Martínez tuvo la suerte de que el señor Efraín Salinas le regalara un boleto para entrar a las 12 horas.

Emocionada, la joven comentó que en la escuela le habían enseñado algo de los artistas italianos y lo que más le interesaba era descubrir la belleza en las pinturas de Leonardo.

Como parte del maratón de 72 horas para despedir la exposición de Da Vinci se presentó la compañía de teatro Los Conjurados, con la obra Ficticia, y actores con vestimenta del Renacimiento susurraban frases de Miguel Ángel o anécdotas de su vida a la gente que permanecía en las filas.

En la pantalla gigante ubicada en el corredor Ángela Peralta se proyectó la película La agonía y el éxtasis, del director Carol Reed.

La muestra, que por primera vez presenta obras del genio del Renacimiento Leonardo da Vinci, concluye este lunes a las ocho de la mañana. La muestra Miguel Ángel Buonarroti: un artista entre dos mundos permanecerá hasta el 27 de septiembre en el Museo del Palacio de Bellas Artes (avenida Juárez y Eje Central Lázaro Cárdenas).