Nueva York.

Daryan, un hijo del ex vicepresidente de la FIFA Jack Warner, confesó ante la justicia estadunidense ser culpable de montar una estafa con la venta de boletos de los mundiales de 2006 y 2010, aunque aseguró que el organismo no estaba al tanto del delito, según documentos del caso.

El trinitense Daryan Warner y su hermano se declararon culpables de diferentes delitos en audiencias por separado ante un juez federal de Nueva York en octubre y julio de 2013, respectivamente, cuyos contenidos fueron dados a conocer por el sitio de Internet BuzzFeed.

Daryan admitió ser responsable de tres cargos, entre ellos conspiración por fraude y por lavado de dinero y por la reventa de boletos de Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, engañando a la FIFA.

“Acordé con otro para comprar entradas para las copas de esos años y revenderlas con una ganancia sustancial.

En 2006 los adquirí directamente de la FIFA y engañé al organismo haciéndole creer que mi socio en la reventa no estaba involucrado en la transacción, porque creo que no me los habría vendido si él estaba inmiscuido, afirmó en su confesión.

En 2010 compré boletos de otros, con el propósito de engañar a la misma FIFA haciéndole pensar que no recibía billetes porque creía que ya no me los vendería directamente, agregó Daryan, quien podría ser condenado a 20 años de prisión.

Jack Warner, ex vicepresidente del organismo rector del balompié internacional y ex titular de la Concacaf, está acusado de haber recibido 10 millones de dólares por apoyar la candidatura de Sudáfrica para organizar el Mundial de 2010, entre otros cargos.

Este controvertido traspaso fue aprobado al más alto nivel del Estado. El semanario Mail&Guardian publicó una carta sobre el tema, tratado en 2007 por el presidente del comité organizador sudafricano, Danny Jordaan, con la FIFA para encontrar una modalidad de pago.

El documento no demuestra que hubiera fraude ni contradice las afirmaciones del ministro de Deportes, Fikile Mbalula, quien jura que Sudáfrica nunca corrompió a personas para obtener la organización del Mundial.

Sin embargo, certifica que el dinero fue prometido y que las discusiones eran entre el comité organizador, la FIFA y los más altos dirigentes políticos sudafricanos de la época, entre ellos el presidente Thabo Mbeki y la ministra de Exteriores, Nkosazana Dlamini-Zuma, actual presidente de la Comisión de la Unión Africana (UA).

Por su parte, el ex presidente de la UEFA Lennart Johansson dijo que Joseph Blatter tiene que marcharse: Debe irse inmediatamente. Creo que la investigación en curso le ha dejado saber que descubrirán exactamente lo que se hizo y con quién. La gente quiere vernos limpios. Pueden ver que cada vez que se aparece en una cancha lo abuchean. Dejan en claro que no están satisfechos.

El dirigente suizo anunció su renuncia en el marco del peor escándalo en la historia de la FIFA por denuncias de corrupción, pero seguirá en el cargo hasta que se realicen nuevas elecciones, lo que sucedería antes de diciembre.

El presidente de la Federación Inglesa (FA), Greg Dyke, acusó que Sepp odia a los ingleses, a la FA y a los medios británicos, pero que eso ya no tiene importancia porque él está muerto políticamente y cree que será detenido.

A su vez, Zinedine Zidane afirmó que todo lo que sea nuevo en la cabeza de la FIFA estará bien, en respuesta a una pregunta sobre si vería con buenos ojos que su compatriota Michel Platini, presidente de la UEFA, fuera el sucesor de Blatter.