No obstante que centrales como la Confederación de Trabajadores de México (CTM) han advertido que Ley de Ayuda Alimentaria se incumple y que en la gran mayoría de empresas es letra muerta, ésta legislación ya tiene reglamento. Ayer se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) dicho ordenamiento, y según informó el titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Alfonso Navarrete Prida, el propósito de esta ley es mejorar el estado nutricional de los trabajadores y prevenir enfermedades vinculadas con una alimentación deficiente, así como proteger la salud en el ámbito ocupacional. El funcionario explicó que los gastos derivados de la ayuda alimentaria son deducibles de impuestos para los patrones, los cuales podrán decidir por dos opciones para entregar esta prestación: la primera, proporcionar comidas a los trabajadores en comedores, restaurantes o establecimientos que sean financiados por las empresas. La segunda forma de otorgar este beneficio es a través de la entrega de despensas, ya sea como canastillas de alimentos, o bien por medio de vales, sostuvo. Según Navarrete Prida, aquellos patrones que prefieran otorgar a los trabajadores comidas a través de comedores de la empresa, deberán cumplir con los esquemas de proporcionar una dieta correcta, es decir, completa, equilibrada, saludable, suficiente, variada y adecuada, en términos de las disposiciones de la Secretaría de Salud. Incluso, tendrán que observar condiciones y medidas de seguridad y salud en el trabajo.