Las agrupaciones del Frente Auténtico del Campo (FAC) afirmaron que en los cambios de titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) pasaron de los apapachos a la fama de hombre rudo.

Jorge Carlos Ramírez Marín, ex titular de Sedatu, con apapachos no logró resolver múltiples conflictos agrarios; si Jesús Murillo Karam –quien el pasado viernes asumió el cargo– pretende resolver los conflictos con mano dura, terminará confrontándose con el campesinado.

Marco Antonio Ortiz Salas, dirigente de la Coalición de Organizaciones Democráticas, Urbanas y Campesinas (Coduc), consideró que Murillo Karam se enfrentará a un complicado panorama en el agro nacional, pero si intenta resolverlo con mano dura sólo generará mayores conflictos de los existentes. Eso no es lo deseable para un país que se encuentra inmerso en una grave crisis.

Murillo, dijo, llega a la Sedatu desgastado por el tema de Ayotzinapa, con pocos recursos finacieros para resolver los problemas agrarios, de reordenamiento rural y de vivienda; el panorama que enfrentará es bastante complicado.

Según información de la Sedatu, hay 426 conflictos urgentes; 58 por ciento se localizan en Oaxaca, Chiapas, Michoacán, Veracruz y Tabasco; el resto están en Jalisco, Puebla, Durango, Tamaulipas, Guerrero, Guanajuato, Hidalgo, estado de México, San Luis Po­tosí, Sonora, Chihuahua, Morelos, Nayarit, Coa­huila, Nuevo León, Querétaro, Sinaloa, Zacatecas, Yucatán, Aguascalientes y Ba­ja California, los cuales son considerados un riesgo para la estabilidad, la seguridad y la paz social.