El uso faccioso y electoral de la defensa de los animales promovida por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) fue denunciado en la tribuna de la Cámara de Diputados, al presentarse para su votación la reforma a las leyes generales de Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, así como la de Vida Silvestre, con el propósito de impedir en el ámbito federal el uso de cualquier especie animal en los circos.

Ello, a pesar de que existe un expediente en contra del PVEM en el Instituto Nacional Electoral porque mantiene tapizado el país con propaganda evidentemente política, con el argumento de la defensa de los animales, y de las crecientes críticas en su contra porque así como pugna por la vida de los animales también promueve la pena de muerte contra los secuestradores.

Los cambios en ambas leyes se aceptaron con 267 votos en favor, 66 en contra y 40 abstenciones. El sufragio en contra que desconcertó a los integrantes del Verde fue el de la diputada del PRI Claudia Delgadillo, quien preside la Comisión del Trabajo.

El dictamen refiere en su exposición de motivos que además de constituir una fuente de propagación de enfermedades, los animales en el circo representan un peligro para la salud e integridad física de la población.

La modificación al artículo 78 de la Ley General de Vida Silvestre refiere que queda prohibido el uso de ejemplares de vida silvestre en circos. Y en la fracción 24 del artículo 123 se considera infracción a la norma realizar actos que contravengan las disposiciones de conservación de vida silvestre fuera de su hábitat natural establecidas en la presente ley y en las disposiciones que de ellas se deriven.

Así, cuando el PVEM, apéndice del PRI en la Cámara de Diputados, pretendía obtener el respaldo unánime de los integrantes del pleno, 100 de ellos le negaron apoyo al revelarse en tribuna que la propuesta es utilizada ya con fines electorales en todo el país.

Manuel Huerta (PT) expuso que si bien el Poder Legislativo ha generado leyes para proteger la vida silvestre, los legisladores del Verde Ecologista, quienes claman la prohibición del maltrato a los animales en circos, aceptan el maltrato en hipódromos, galgódromos, carreras de caballos y peleas de gallos en ferias. Les duele que les diga la verdad, son incongruentes.

Fue Merilyn Gómez Pozos (Movimiento Ciudadano), promovente del dictamen, quien trató de defender el contenido del documento; expuso su razón en favor del texto: el espíritu de nuestra iniciativa es proteger la infancia. Mi deseo es que nuestros niños desarrollen en sus conciencias la tolerancia, el respeto y el amor a todos los seres vivos.

Su correligionario Ricardo Mejía Berdeja recordó la “propagandización fuera de la ley y violatoria de la equidad que el Verde ha hecho de ésta y otras banderas, muchas de ellas falsas.

Hay que ser congruentes; no se puede defender la vida animal y pedir la muerte de las personas. No se puede luchar contra el maltrato animal y permitir la violación de los derechos humanos; en un régimen democrático se debe respetar íntegramente cualquier forma de vida.