La comunidad de inversionistas puso de moda a México antes de que llegaran los hechos, afirmó Ángel Cano, director general del Grupo BBVA, controlador de BBVA Bancomer, el principal consorcio financiero en el país. Los hechos no están llegando con la misma velocidad que nos hubiera gustado, respondió al ser interrogado sobre el retraso en la aprobación de leyes que reglamentan las reformas estructurales impulsadas por el gobierno federal el año pasado.

Corrupción e inseguridad son los dos principales lastres a la competitividad del país, apuntó Cano, en una plática desde Madrid con un grupo de reporteros mexicanos.

En la plática terció Vicente Rodero, director general de BBVA Bancomer, la principal filial del consorcio y que aporta 42 por ciento de las ganancias globales del Grupo BBVA.

México necesita crecer. Hay una oportunidad enorme. México tiene problemas estructurales de pobreza e informalidad en la economía que sólo se pueden resolver con crecimiento. Hay dos temas que pueden inhibir ese crecimiento: la inseguridad y la corrupción, expuso Rodero.

Si hay algo que limita la competencia de México, las posibilidades de inversiones rentables, son la corrupción y la inseguridad, abundó. Hay que luchar contra esos dos temas porque pueden impedir que todo el potencial de crecimiento que tiene México no se aproveche en su totalidad, agregó. Se ven avances en (combatir) la inseguridad, pero en corrupción todavía no se ven acciones claras, aunque no digo que no se estén haciendo, puntualizó.

Ángel Cano, quien dirige el grupo bancario, con actividad en 30 países y activos por 900 mil millones de dólares –que equivalen a dos tercios del valor de la economía mexicana–, coincidió en que corrupción e inseguridad son dos de los principales frenos al mayor crecimiento de México.

Lo que se respira aquí (en España) son esos dos conceptos de corrupción e inseguridad, como obstáculos a un mayor crecimiento, expuso Cano. Quizá en México lo ven con más cercanía y aquí menos, pero si hubiera que resumir los dos aspectos que claramente hay que mejorar sería justamente esos dos. El resto es que estos desarrollos de las reformas estructurales se acometan lo más rápido posible para que puedan llevar a la inversión y al crecimiento económico del país. Pero es cierto que estos dos son los más importantes, yo diría, de lejos, abundó.

Calificó de positiva la evolución de la economía del país en los últimos trimestres. Quizá, dijo, el mercado podría esperar un crecimiento más rápido, pero la actividad del BBVA en el país crece más que la economía en su conjunto. Desde el punto de vista del banco, bien; desde el punto de vista del país, me gustaría ver un cambio en el crecimiento económico en los próximos meses.

El mercado había puesto a México demasiado de moda antes de que llegaron los hechos y los hechos no están llegando a la misma velocidad a lo que nos hubiera gustado. Pero entre que no vaya a la velocidad que nos hubiera gustado y que vaya mal, hay mucha distancia, consideró.