Ankara. El primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan proclamó ayer su victoria en las elecciones municipales y prometió que sus adversarios pagarán el precio de las críticas y acusaciones de las que ha sido blanco desde hace meses, ante miles de partidarios reunidos frente a la sede del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) en Ankara. Tras el escrutinio de casi 80 por ciento de los votos, el AKP se encontraba a la cabeza con 44.9 por ciento de los sufragios, muy por delante de su principal rival, el Partido Republicano del Pueblo con 28.4 por ciento.