Acapulco, 2 de marzo.

En una épica final, el búlgaro Grigor Dimitrov se adjudicó la edición 21 del Abierto Mexicano de Tenis, evento categoría ATP 500, tras vencer en un partido de casi tres horas al sudafricano Kevin Anderson por 7-6 (7/1), 3-6 y 7-6 (7/5).

Una final que parecía sobria sin el atractivo de no tener a ninguno de los dos favoritos, como lo era el español David Ferrer o el británico Andy Murray, ambos top-10 de la ATP, que no demeritó el espectáculo y entrega por parte de los dos jugadores.

En el primer set del encuentro no hubo forma de romper la igualada más que con tie break. Dimitrov tuvo mejor suerte y pudo poner ese parcial a su favor, sin embargo, Anderson puso las cosas bajo control en el siguiente set para llevarse un 6-3.

De nuevo la igualdad estaba puesta, el sudafricano había mostrado que su mejor arma, su saque, era la clave que tenía para resolver el encuentro y así parecía que lo era, 13 ases tuvo durante el juego por sólo siete del europeo.

En el tercer set, el agotador partido de nuevo se tuvo que ir a muerte súbita y, ahí, Grigor Dimitrov logró poner punto final gracias a un error no forzado del oponente.

De esta manera, el número 20 del mundo consiguió 316 mil 400 dólares y 500 puntos ATP para el ranking mundial y prometió regresar en 2015 para defender el título, mientras Anderson, quien perdió su segunda final consecutiva este año, obtuvo 142 mil 650 dólares de bolsa y 300 unidades.

El consuelo del sudafricano es que no se fue con las manos vacías de Acapulco al ganar el torneo de dobles con el australiano Matthew Ebden tras doblegar 6-3 y 6-3 al español Feliciano López y el bielorruso Max Mirnyi.

En su balance, el director del certamen Raúl Zurutuza señaló que para el próximo año ya se piensa en ajustes a la superficie dura, pues la cancha está lenta por la mezcla de arena que tiene y que hace que la pelota no bote tanto, por lo que se hablará con la empresa responsable para cambiar la composición del cemento y hacerla más lisa.