Al menos uno de cada cuatro pesos aportados por los trabajadores mexicanos para sus fondos de pensión han sido utilizados por las sociedades de inversión especializadas en fondos para el retiro (siefores) para adquirir bonos de deuda emitidos por empresas privadas, reveló la Comisión Nacional de Ahorro para el Retiro (Consar).

De acuerdo con los más recientes datos del organismo, los fondos de pensiones de los trabajadores tienen casi 90 mil millones de pesos en ese tipo de instrumentos financieros. Dichos recursos financian 25.53 por ciento del total colocado en deuda privada local de largo plazo canalizando recursos a una gran cantidad de sectores productivos, menciona la información de la Consar.

Actualmente los recursos acumulados en los fondos de pensiones de los trabajadores mexicanos suman más de 2.07 billones de pesos, que representa casi 14 por ciento del producto interno bruto (PIB) del país en 2012, y son utilizados, además de la compra de bonos de deuda privada, para financiar deuda pública.

De acuerdo con la Consar, al cierre de abril de este año se tenían invertidos en renta variable internacional (acciones bursátiles) alrededor de 307 mil 229 millones de pesos, mientras que en títulos de empresas locales 197 mil 536 millones.

Además, las mismas administradoras de fondos para el retiro (afores) se han fortalecido con esos recursos. A 16 años de que arrancó el actual sistema de pensiones, cuatro fondos de pensiones mexicanos (afores) se encuentran catalogados dentro del ranking de los 300 más grandes del mundo. Estos son: XXI-Banorte, ocupa la posición número 56 y maneja activos por 48 mil 290 millones de pesos; Banamex se ubica en la 108, con 29 mil 262 millones; Sura, tiene el lugar 142 con 22 mil 990 millones; Profuturo GNP alcanza el sitio 171, con 19 mil 132 millones, y Principal, es la 287 y 11 mil 263 millones de pesos.

Según los datos de la Consar, la operación de los fondos de pensiones de los trabajadores se realiza bajo la filosofía de garantizar la seguridad de los recursos, prover la mejor pensión posible, promover mercados financieros profundos y contribuir al crecimiento económico. Como parte de esos objetivos los administradores de fondos de pensión buscarían fomentar la diversificación de los portafolios de inversión; promover el incremento sostenible de los rendimientos; fomentar la innovación financiera, generar mayor liquidez y mejor formación de precios, así como promover la productividad y financiamiento a proyectos.

En busca de esas metas, actualmente la inversión de los fondos del sistema de ahorro para el retiro se hace en la mayoría de las clases de activo empleadas por los fondos de pensiones internacionales, por ejemplo, en deuda privada, divisas, en renta variable (acciones bursátiles nacionales y extranjeras), Certificados de capital de desarrollo (CKD’s, por sus siglas en inglés) y Fibras (fideicomisos inmobiliarios y de bienes raíces) y hasta mercancías.

Si bien todavía 53.2 por ciento de los recursos de los trabajadores se encuentra invertido en deuda gubernamental, 17.5 por ciento del total se ha utilizado para financiar a empresas nacionales; 14.2 en renta variable internacional (acciones) y 9.1 en nacional; 3.8 en instrumentos estructurados; 2.1 en instrumentos de deuda internacional y 0.1 en mercancías.