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Los merengues ganan 2-1 y se fortalecen rumbo a la Champions

Real Madrid repite victoria ante un Barcelona en crisis

Lionel Messi alcanzó a Di Stéfano como goleador de los clásicos

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Euforia tras el tanto de Sergio Ramos, quien dio el triunfo a los blancosFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Domingo 3 de marzo de 2013, p. a14

Madrid, 2 de marzo.

Al Real Madrid le bastó hoy orden, rigor y sentido de la oportunidad para superar 2-1 a un Barcelona que no sale del pozo.

A siete minutos del final, Sergio Ramos decidió con un cabezazo el gol del triunfo, que no sólo sirvió al Real Madrid para sumar tres puntos, sino para ganar una tremenda moral para el partido del martes ante el Manchester United, en la Liga de Campeones.

Todo lo contrario al Barcelona, que sólo se pudo aferrar de un posible penal no pitado sobre Adriano en el descuento para justificar la derrota.

El encuentro, de la jornada 26 de la liga española, mostró el dispar momento que viven estos equipos: Real Madrid está lanzado y Barcelona vive angustiado, como si hubiera perdido la fe en todo aquello que lo hizo grande.

Y eso que los merengues ofrecieron en el estadio Santiago Bernabéu una alineación con siete suplentes. Respecto del equipo que ganó 3-1 en el Camp Nou, sólo se mantuvieron Diego López, Raphael Varane, Sergio Ramos y Fabio Coentrao. No estuvo Cristiano Ronaldo de inicio.

En cambio, los azulgranas dispusieron de casi toda su artillería, con Thiago Alcántara en lugar del lesionado Xavi Hernández, más David Villa en la delantera, junto a Lionel Messi y Pedro. Si su alineación se pareció a la del martes, su juego también.

La primera parte fue indigna de un clásico, con un Madrid que no quiso y un Barcelona que no pudo.

Con todo, el Real Madrid aparentó estar más cómodo que su rival. Empleó la táctica que tanto rédito le dio en recientes encuentros ante el Barcelona, defendiendo muy junto, en pocos metros, e intentando tirar contras. Sin embargo, no es tan ventajosa en ataque si no se cuenta con Ronaldo. Él solo arma toda una delantera.

Benzema abrió el marcador

Aun así, fue el Real Madrid el primero en morder. Ocurrió a los seis minutos, en una jugada que desnudó las carencias defensivas blaugranas. El bisoño Álvaro Morata arrancó en la izquierda, Dani Alves no tapó, Javier Mascherano se comió el centro y Karim Benzema marcó a placer (1-0).

El Barcelona pareció desconcertado y mostró ese juego soso de las semanas recientes: mucha posesión para nada. Falto de profundidad, el equipo se encomendó a Messi, que esta vez sí apareció.

Al minuto 18, con un balón filtrado entre la distraída defensa blanca, el argentino marcó con un disparo vertiginoso de zurda que sorprendió a Diego López, mal parado.

En el complemento, José Mourinho fue el primero en mover piezas: a los 57 entró Ronaldo e inmediatamente comenzaron a ocurrir cosas en el área visitante.

El cuadro visitante prosiguió con su movimiento cansino de balón, falto de profundidad y sin apenas subidas de sus laterales. Como el martes, los defensas blancos vivieron tranquilos.

Al minuto 78 cayó el gol definitivo. En un saque de esquina, tan mal defendido por el Barcelona como acostumbra, Ramos se elevó y marcó el 2-1.

Poco después Ronaldo mandó una falta al palo en pleno delirio de la grada, que añadió motivos para creer en el partido de Champions en Old Trafford. Todo lo contrario que el Barcelona, que necesita redoblar sus sesiones de diván.

Los azulgranas protestaron una jugada final en la que Adriano cayó en el área. Acabó desquiciado con esa acción y Valdés fue expulsado por insultar al árbitro Pérez Lasa. Os habéis cagado, no tienes vergüenza, escribió el silbante en el acta.

Por su parte, el técnico interino Jordi Roura señaló que las imágenes son perfectamente claras, mientras Ramos atajó: No sé si hay contacto. Tendría que verla, pero también es verdad que ha habido otras y no creo que haya sido una jugada determinante para el partido.

El Barcelona acabó preso de un ataque de nervios, ahora con 13 puntos sobre un Madrid eufórico.

Lo único positivo para el cuadro catalán fue que Messi firmó el gol número 18 de su carrera ante los merengues, con lo que igualó a Alfredo di Stéfano como máximo anotador en los clásicos.

El argentino Diego Armando Maradona vió el partido en el palco de Cristiano Ronaldo.

En otros juegos, Marcelo Bielsa tomó un respiro con la victoria del Athletic de Bilbao 1-0 al Osasuna; Deportivo La Coruña empató sin goles ante Rayo Vallecano y el Valencia empató 2-2 ante Levante, con el mexicano Andrés Guardado los 90 minutos.