Presuntos delincuentes incendiaron con granadas 20 vehículos decomisados por el Ministerio Público que se encontraban en el corralón de la Policía Federal (PF) en Fresnillo, Zacatecas, unos 65 kilómetros al noroeste de la capital del estado.

Los atacantes llegaron en los primeros minutos del martes a la sede de la PF, ubicada en la salida sur de Fresnillo, y atacaron los vehículos, entre ellos varias camionetas de lujo, sin que nadie se los impidiera, a pesar de que agentes de la corporación siempre vigilan el lugar.

Protección civil municipal acudió con los vehículos cisterna 509, 512 y 513, así como dos pipas de agua del departamento de parques y jardines del municipio. Luego de dos horas sofocaron el fuego que consumió en su totalidad las unidades motrices.

Autoridades de la PF guardaron silencio durante todo el día, pero fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública estatal advirtieron que el incendio habría tenido el propósito de eliminar la evidencia pericial de vehículos que han sido confiscados con droga y armamento, o que han sido utilizados en enfrentamientos contra las corporaciones policiacas y el Ejército.

Por la mañana, en la misma ciudad, desconocidos colocaron mantas con las fotografías de cuatro individuos y la leyenda: “Se buscan, viven en Fresnillo y son amigos de El Cachetes, pero también se van a morir estos mierdas”.

En un paraje de la carretera interestatal Fresnillo-Plateros (cerca de la nueva base militar que el 8 de septiembre pasado inauguró el secretario de la Defensa, Guillermo Galván) fueron localizados los cadáveres de dos personas, sobre cuyos cuerpos los sicarios dejaron una manta con la misma leyenda. Además de estas dos personas fallecidas, otras 15 fueron asesinadas ayer en presumibles ajustes de cuentas entre bandas delictivas, y sus cuerpos fueron levantados por autoridades ministeriales de Jalisco, Sinaloa, Durango y Nuevo León.

Uno ataque ocurrió contra tres jóvenes en el barrio Analco, en Guadalajara, Jalisco, que provocó la muerte de dos de ellos y lesiones al tercero. Los fallecidos tenían 16 y 23 años de edad.

En la colonia La Esperanza, de la misma ciudad, la señora Adriana Santos Calvillo fue ejecutada por hombres armados. Estaba en compañía de su hijo de tres años, quien presenció cómo los sicarios le dispararon a su madre y huyeron. En la colonia Lomas de Polanco fue encontrado el cuerpo de un hombre en la cajuela de un taxi abandonado.

El asesinato de otro hombre fue reportado en la colonia Unidad República, de Zapopan, Jalisco, mientras en Tonalá fue localizado el cuerpo de un hombre en un canal de aguas residuales en la colonia El Manantial.

Agentes de la PF encontraron una fosa con los cadáveres de dos mujeres y un hombre en las inmediaciones de la comunidad El Tambor, municipio de Altata, zona costera ubicada a cerca de 40 kilómetros de Culiacán, Sinaloa. Asimismo, la Policía Ministerial informó que los ciudadanos Pedro Gámez Rivera y Natividad Madero Núñez fueron asesinados en Yecorato, municipio de Choix, y El Carrizal, jurisdicción de Cosalá, respectivamente.

En Durango, los civiles Juan José Vidaña Murillo y Clemente Contreras Zúñiga fueron ejecutados en los municipios de Lerdo y Santiago Papasquiaro.

Un hombre fue abatido a balazos en Loma Larga, al sur de Monterrey, Nuevo León, mientras en la colonia Celestino Gazca, en la alcaldía de Escobedo, fue localizado un cadáver de sexo masculino.

En Mexicali, Baja California, mantas con mensajes contra policías ministeriales fueron colocadas en el puente vehicular de la calzada Independencia y bulevar Adolfo López Mateos, entre otros puntos.

Durante la segunda campaña Por un Chiapas sin armas, el Ejército canjeó por computadoras portátiles mil 894 armas cortas y mil 489 largas, las que fueron destruidas el lunes en Tuxtla Gutiérrez, informó Raciel López Salazar, titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado.