Chicago, 7 de agosto. El gobierno de Estados Unidos recortaría esta semana otro 15 por ciento su pronóstico de este año para la cosecha del maíz, diezmado por la sequía, lo cual elevará la preocupación en naciones como China e India, que tratan de reducir su inflación. En su primer informe basado en sondeos sobre la zona central estadunidense, el Departamento de Agricultura (USDA) confirmaría los reportes de que la peor sequía desde 1998 ha devastado los mayores campos de maíz del mundo, extendiendo a un tercer año un periodo de inventarios muy bajos.

Probablemente también recortará en 8 por ciento su estimado para la producción de soya, con lo cual reducirá los inventarios domésticos a su nivel más bajo en 32 años desde que hay registro. Si bien podría haber tiempo para que las recientes lluvias revivan algunos cultivos, los campos de maíz han desaparecido, dejando pocas esperanzas para que se enfríen los elevados precios, que llegan casi a récord.

Los problemas amenazan con multiplicarse: una sequía en el este de Europa atenúa las perspectivas de la cosecha de trigo en los principales países exportadores de granos, incluyendo Rusia y Kazajistán, mientras un débil monzón en India amenaza las cosechas en esa nación, todo lo cual aumenta los desafíos para las autoridades del mundo.