Con escenas desgarradoras que exhiben la creciente violencia en el país, la obra de teatro Misericordia, de Hugo Alfredo Hinojosa, se propone abrir la conciencia y el corazón de los espectadores ante una sociedad indeferente con la tragedia ajena.

Así lo explicó Daniel Giménez Cacho, quien dirige el montaje que hoy se estrena en el Teatro Casa de la Paz, de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

En Misericordia participan ocho actrices de la Compañía Nacional de Teatro (CNT). Mostrará, en una temporada que durará sólo tres semanas, la apabullante realidad que carcome al país.

Esta obra no es condescendiente con las víctimas y su momento histórico, sino que las cuestiona y confronta con su propia naturaleza, explicó Hinojosa, quien escribió el texto basado en ideas de Esquilo, Eurípides, Cormac McCarthy y el testimonio del poeta Javier Sicilia.

El dramaturgo tijuanense también indagó sobre la desaparición o muerte de los hijos de diversas familias y se adentró en la problemática de novios, esposos y de las personas que se encuentran inmersas en esta terrible realidad.

Además, enriqueció su obra con información generada en la prensa, audios, videos y testimonios de víctimas, así como la lucha que libra el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad.

“Lo que existe alrededor de estos temas –como la violencia, los desaparecidos, mutilados o asesinados– es mucha indiferencia, silencio, control mediático, amenazas y todo lo que se hace para que no se hable de ello”, manifestó Daniel Giménez Cacho.

Desde la trinchera del teatro

“Desde nuestra trinchera que es el teatro –prosiguió Giménez Cacho– invitamos al diálogo y de esta forma seguiremos luchando para combatir la indiferencia y propiciar que la sociedad vuelva la vista hacia este problema.”

En síntesis, resaltó, el esfuerzo consiste en ser conscientes de lo que está pasando, organizarnos mejor como sociedad para combatir esta problemática. Habrá que ver los resultados cuando el montaje sea presentado en otras ciudades del país.

Daniel Giménez Cacho, director de de la obra MisericordiaFoto María Meléndrez Parada

La actriz Julieta Egurrola en una escena de Misericordia Foto CNT/ Sergio Carreón Ireta

Al respecto, Giménez Cacho manifestó: Decir las cosas, sacar los odios, los venenos, los peores pensamientos oscuros que provoca la tragedia, es también apelar al lado curativo del teatro, que esto sea reconocido socialmente, que nos toque emotivamente sin regodeo en el dolor y actúe contra la indiferencia.

Luis de Tavira, director artístico de la CNT, informó que Misericordia es una propuesta surgida del taller de actrices de esa compañía, que tuvo la necesidad urgente de abocarse al asunto, porque es ante todo la realidad que vivimos y nos asalta, la cual debe tener una expresión en el teatro”.

En este montaje en que se plantean preguntas complejas sobre el ser humano, el sufrimiento y lo que podría ser el infierno, es una experiencia insólita y una enorme oportunidad de devolverle al teatro la raíz humana que le otorga el sentido de su dignidad artística.

De esa manera, subrayó De Tavira, la actividad teatral nos reorientará y rescatará de tanta banalidad.

Reclamos de justicia

La actriz Julieta Egurrola, quien integra el reparto junto con Teresa Rábago, Erika de la Llave, Renata Ramos, Carmen Mastache, Gabriela Núñez, Ana Ligia García y Rocío Leal, manifestó que el trabajo realizado durante el montaje ha sido intenso y doloroso.

Incluso, dijo, los nombres de las mujeres en esta puesta son emblemáticos, y también se enfatiza en escena la importancia del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, el cual dio nombre y cara a los daños colaterales, a lo que únicamente eran cifras. En la historia –escrita y montada en dos meses– se entretejen las experiencias de mujeres que marchan en la caravana de la paz y reclaman justicia por sus hijos, esposos y familiares desaparecidos.

Mientras, en otro momento del montaje, una mujer es secuestrada y padece los castigos extremos de sus victimarios.

Misericordia concluirá temporada el 29 de julio; funciones jueves y viernes a las 20 horas, sábados y domingos a las 13 y 18 horas en el Teatro Casa de la Paz (Cozumel 33, colonia Roma).