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Ver día anteriorSábado 5 de mayo de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Apuntes Postsoviéticos

Fricciones

L

a convivencia de las vecinas repúblicas centroasiáticas de la antigua Unión Soviética dista de ser idílica y las fricciones entre sus autoritarios gobernantes amenazan, por momentos, con derivar en un conflicto armado.

Al borde de la guerra estuvieron hace poco Uzbekistán y Tayikistán, a raíz de la crisis energética que provocó la suspensión del suministro de gas natural uzbeko, la cual afectó sobre todo a las empresas tayikas más importantes.

Éstas son el único consorcio de aluminio en Asia central, Talko –que da trabajo a una ciudad de 30 mil habitantes y surte a unas 40 empresas más pequeñas y centrales hidroeléctricas–, y Tayiktsement, cuya producción completa se usa en obras de la presa de Rogun.

La construcción de esta última –además de la animadversión personal entre el uzbeko Islam Karimov y el tayiko Emomali Rajmon, los presidentes de ambas naciones, y las disputas territoriales–, es el origen de la actual tensión entre estos dos países.

Tayikistán, que ya exporta electricidad a países vecinos, considera prioritario levantar la nueva hidroeléctrica en Rogun, la cual tendrá la represa más alta del mundo a 335 metros y un embalse con capacidad para almacenar 13 kilómetros cúbicos de agua.

Los habitantes de la región están en desacuerdo con la obra debido a que muchos lugares, sagrados para ellos, quedarán bajo el agua, pero la oposición más fuerte proviene de Uzbekistán, que teme un daño irreparable al medio ambiente y un desastre natural.

Tashkent denuncia que Dushambé tiene la intención de cortar el río Vajsh, afluente del Amudariá, sin esperar el dictamen de una comisión internacional de expertos, acusación que rechaza el gobierno tayiko al asegurar que el año próximo se conocerán las conclusiones de los especialistas del Banco Mundial, a cargo de la investigación.

Entre tanto, Uzbekistán comenzó a desmontar las vías férreas que conducen al sur de Tayikistán, donde viven unas 3 millones de personas que podrían quedar aisladas sin ferrocarril, después de cortar el tráfico de mercancías hacia territorio tayiko por la voladura de un puente, calificada por el gobierno uzbeko de atentado terrorista.

Entre las controversias fronterizas, Uzbekistán busca consolidarse en el embalse de Farjad en el río Syrdariá, lo que Tayikistán denomina intento de anexión de parte del territorio tayiko.

Con la reciente reanudación del suministro de gas natural, se evitó una guerra, pero es claro que la relación bilateral entre Uzbekistán y Tayikistán podrá normalizarse sólo cuando cambien sus vitalicios gobernantes.