Puerto Vallarta, Jal., 20 de abril. La Unión Europea (UE) aseveró que la expropiación de la mayoría de acciones de YPF a la petrolera Repsol incrementa la lista de decisiones problemáticas tomadas por Argentina recientemente sobre comercio e inversión.

En una carta enviada al gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que se dio a conocer durante la reunión de ministros de economía y comercio del G-20, el comisionado de Comercio de la UE, Karel de Gucht, advirtió que la expropiación envía una señal muy negativa a los inversionistas internacionales en Argentina.

El documento se entregó posteriormente a la prensa, una vez que en la conferencia donde se dieron a conocer las conclusiones de la reunión ministerial sorpresivamente el representante comercial de la UE, Angelos Pangratis, pidió la palabra al secretario de Economía, Bruno Ferrari, para hablar sobre el tema cuando el mexicano se esmeraba en insistir en que el conflicto entre Argentina y España fue abordado en las sesiones de trabajo del G-20, ya que los participantes se enfocaron a seguir la agenda sobre comercio.

Así, la UE exhortó al gobierno argentino a buscar una solución conjunta con la compañía y sus compromisos internacionales en torno a la protección de inversiones originarias de la UE, en particular sobre el Tratado de Inversión Bilateral España-Argentina.

El comisionado hizo el ofrecimiento de que la UE mantiene todas las opciones abiertas para solucionar el problema, tanto a nivel bilateral como multilateral.

Acusó al país sudamericano de imponer un creciente número de medidas restrictivas a las importaciones por políticas discriminatorias que ya son causa de considerable preocupación porque han tenido un efecto significativamente adverso en las exportaciones de la Unión Europea hacia Argentina.

De Gucht se quejó de que la UE ha tratado de esclarecer y resolver el problema con Argentina, pero sin ningún éxito; desafortunadamente no ha presentado justificación válida para estas medidas y no ha dado ningún paso para remediar la situación.

Así que exhortó una vez más a la nación sudamericana a reconsiderar las medidas que ha adoptado y que son incompatibles con la Organización Mundial del Comercio (OMC), así como revisar y remover las medidas formales que obstaculizan indebidamente las importaciones.

La UE es el segundo mercado de exportación de la nación sudamericana y el principal inversionista, ya que concentra alrededor de 50 por ciento de la inversión extranjera directa, recordó el comisionado, por lo que se ufanó de que contribuyen en la actividad económica y en el empleo de casi todos los sectores.

Espero sinceramente que Argentina dé los pasos necesarios para evitar cualquier impacto negativo en las relaciones comerciales y de inversión con la UE, puntualizó.