Directora General: CARMEN LIRA SAADE
Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER  
Domingo 26 de febrero de 2012 Num: 886

Portada

Presentación

Bazar de asombros
Hugo Gutiérrez Vega

El temple narrativo
y los perros

José María Espinasa

Tocar la tierra
Paula Mónaco Felipe entrevista
con Gustavo Pérez

Por ti yo vivo soñando
Alessandra Galimberti

De la escritura como ausentamiento
Julio Prieto

Textos selectos (antología)
Macedonio Fernández

Un precursor de genios
Esther Andradi

Una alquimista
de la palabra

Adriana Cortes Koloffon entrevista con Amparo Dávila

Leer

Columnas:
Jornada de Poesía
Juan Domingo Argüelles

Paso a Retirarme
Ana García Bergua

Bemol Sostenido
Alonso Arreola

Cinexcusas
Luis Tovar

La Jornada Virtual
Naief Yehya

A Lápiz
Enrique López Aguilar

Artes Visuales
Germaine Gómez Haro

Cabezalcubo
Jorge Moch


Directorio
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Naief Yehya
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¿Israel o Irán ante una amenaza existencial? (II Y ÚLTIMA)

¿Borrar del mapa?

La narrativa de la campaña propagandística antiiraní parte de la certeza de que el régimen de Teherán ha amenazado con borrar a Israel del mapa, que Irán es una nación que promueve el terrorismo y que no se detendrá ante nada hasta cumplir sus deseos. En esta historia, Israel se presenta a sí mismo como un país diminuto y vulnerable rodeado de peligrosos enemigos que sólo desean tirar a los israelíes al mar. Tel Aviv olvida mencionar su propio y muy real arsenal de más de trescientos misiles nucleares, así como su agresiva política intervencionista. No han sido pocos los medios (recientemente también el Washington Post) que han demostrado que la presunta amenaza que supuestamente lanzó Mahmoud Ahmadinejah no fue más que una (¿deliberadamente?) mala traducción del farsi. La distorsión comenzó precisamente cuando la corresponsal del New York Times (NYT) en Teherán, Nazila Fathi, publicó el 27 de octubre de 2005 un artículo titulado “Wipe Israel ‘off the Map’, Iranian Says” (“Borrar a Israel del mapa, dice el iraní”). Ahmadinejad en realidad estaba citando las siguientes palabras de un discurso de 1980 del ayatola Khomeini: “El régimen de ocupación sobre Jerusalén debe desaparecer de la arena del tiempo [el ayatola había dicho de las páginas del tiempo]”, pero algún traductor anónimo decidió que eso quería decir que Israel debía ser eliminado.

Intención o fatwa


Ali Khamenei

El National Intelligence Estimate (Estimación de Inteligencia Nacional) realizado en febrero del año pasado concluyó que Irán no está tratando de desarrollar armas nucleares, y que igual a lo concluido en su informe de 2007, “Irán parece mantener abierta la opción de desarrollar armas nucleares… se puede decir que están tratando de crear las posibilidades que servirían a ese fin… pero no sabemos si Irán eventualmente se decidirá a construir armas nucleares”.  Los inspectores de la ONU han tenido acceso a las plantas de enriquecimiento y certifican que ningún uranio enriquecido ha sido canalizado para fines ilícitos. Además, en un Estado teocrático como el iraní, la voz del ayatola Ali Khamenei, el más alto líder político y religioso, es la máxima ley, y él ha promulgado una fatwa que prohíbe bajo el islam la producción, almacenamiento y uso de las armas nucleares, por tanto: “la República islámica de Irán jamás adquirirá esas armas”.

La guerrita del NYT

A pesar de numerosas señales de que no hay certeza alguna de las intenciones nucleares iraníes, el New York Times ha lanzado una misión para proteger a la humanidad de la amenaza persa. La corresponsal del NYT en Israel, Isabel Kersher, ha optado por usar la frase:  “Irán está trabajando para desarrollar un programa de armas”; esta rebuscada formulación es una insinuación suficientemente vaga como para no comprometer al diario por difamación, pero suficientemente incendiaria para mantener al lector alarmado. El 5 de enero de 2012, Steven Erlanger escribió en un artículo de primera plana que la Agencia Internacional para la Energía Atómica (AIEA) había determinado que “el programa nuclear iraní tiene un objetivo militar” que amenaza a Occidente y a Israel. El problema es que el reporte de la aiea nunca aseguró algo semejante. En la versión en línea del artículo, el NYT borró esa afirmación, pero no hizo mención del “error”. El 27 de enero de 2012, también en primera plana el NYT publicó un artículo de Ethan Bronner en el que anuncia que los israelíes han evaluado que un ataque contra Irán no tendría terribles consecuencias; de esta manera se trata de disuadir a aquellos que se oponen a otra guerra al minimizar la reacción iraní, como cuando el gobierno de Bush aseguraba que las tropas estadunidenses serían recibidas en Irak con flores y dulces. El siguiente domingo 29 de enero, en la revista dominical del NYT se publicó el artículo de portada de Ronen Bergman, “Will Israel Attack Iran?” ("¿Atacará Israel a Irán?") en el cual se justifica el futuro ataque, al decir que se cumplen tres condiciones: Israel tiene la capacidad de causar gran daño a las plantas nucleares iraníes y puede resistir cualquier contraataque, hay un apoyo tácito de la comunidad internacional para llevar a cabo el ataque y todas las demás posibilidades para contener la amenaza han sido agotadas. El artículo presenta la perspectiva israelí y sin pudor ofrece una colección de conjeturas y verdades a medias en las que asegura que Irán tiene cinco toneladas de material “para fabricar cinco o seis bombas”. Bergman concluye que es inminente que Israel ataque a Irán este año, con o sin el apoyo de EU. Mientras hay quienes piensan que esta campaña tiene sólo la finalidad de desmoralizar y debilitar lentamente a Irán, es claro que el espectro de la guerra se materializa cada día más, particularmente porque en un año electoral, si Israel ataca, Obama se verá obligado a mostrarse muy macho, ya que de lo contrario terminará por perder el fundamental voto judío.