Espectáculos
Ver día anteriorLunes 20 de febrero de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Bridemaids está nominada al Óscar; Young Adult recibe elogios

Chicas malas se apoderan de Hollywood
The Independent
Periódico La Jornada
Lunes 20 de febrero de 2012, p. a14

Hay un nuevo tipo de chica en Hollywood. Es la que le roba el marido a su felizmente casada amiga de la preparatoria, la que vomita sobre su vestido de novia y probablemente acabe dándole una golpiza a alguien.

Por fin, las antiheroínas tienen buena oportunidad de taquilla en Hollywood. No sólo el elenco de Bridesmaids acapara un puñado de postulaciones al Óscar, sino Rooney Mara ha recibido elogios por su retrato de Lisbeth Salander, protagonista de La chica del dragón tatuado, que es prácticamente una sociópata.

En Gran Bretaña se proyecta Young Adult, que reúne a la guionista y al director de Juno, Diablo Cody y Jason Reitman, y presenta en el papel estelar a Charlize Theron como Mavis, una escritora de 37 años de edad que vive en un mundo de fantasía adolescente. Va a casa para recuperar a su primer amor; lo malo es que él está casado y tiene un bebé.

Manipuladora y magnífica

Eso bastaría para alejar al público, en especial al femenino, pero en Estados Unidos la película recibió elogios de los críticos en su estreno. Coinciden en que Mavis es malvada, manipuladora… y magnífica.

“Percibí un vacío en el cine –explica Cody, ganadora de un Óscar, acerca de su creación más reciente–. Parecerá pretencioso, pero me pareció que hacía mucho tiempo, o quizá nunca, que no veía una protagonista femenina despiadada, defectuosa y fea. Quiero decir, no en lo físico, claro: es Charlize. Pero sentí que hacía falta escribir una antiheroína.

Así pues, se me ocurrió la idea de alguien que se queda estacionada en la preparatoria, que fue su etapa climática, y ahora se pregunta si puede ser de nuevo la reina de la escuela.

Mavis es dueña de un perrito y tiene problemas con la bebida. Pero la razón por la que el público ve más allá de su dura coraza exterior es porque reconoce que es real. “La mayoría de las mujeres pueden verse en Mavis –asegura Cody–. Pienso mucho en que muchas de esas cosas tan desagradables que hace las hacemos todos cuando estamos en modo de supervivencia. Las pequeñas mentiras, eso de creer que la hierba del prado vecino es más verde. Y es una mujer muy solitaria: creo que todos hemos experimentado eso.”

Mavis es una chica mala adulta; Mean Girls, escrita por la comediante Tina Fey en 2004, reinventó a la moderna muchacha perversa de la preparatoria. Sin embargo, la protagonista de esa película, Cady, la buena que se vuelve mala (interpretada, irónicamente, por Lindsay Lohan), tiene la revelación de que su conducta es incorrecta. Y en Bad Teacher, del año pasado, la pícara y malhablada heroína representada por Cameron Diaz es domada por el amor de un buen hombre (o al menos por el de Jason Segel).

Young Adult no ofrece tal comodidad. “En las películas siempre hay momentos de redención; en la vida no mucho –apunta Cody–. Pensé en darle un final más tradicional, pero me pregunté: ‘¿qué vas a hacer? ¿Le vas a quitar los cojones o a neutralizarla?’”

Aun así, tenía miedo de que jamás llegara a estrenarse. “Estamos acostumbrados a la villana hermosa, pero no a que ella sea la heroína. Y en Hollywood, nadie dice: ‘Me encanta que hayas escrito una cinta interesante y desafiante’. Lo que les encanta es que uno les presente algo que parezca familiar y sea atractivo para muchos’.”

Por fortuna, para Cody, Bridesmaids fue el éxito sorpresa del verano. Esta comedia gruesa ha generado gruesas ganancias, de unos 300 millones de dólares. A raíz de su éxito, todos los estudios han estado clamando por su propio cañonazo subversivo femenino, y Kristen Wiig, guionista y estrella de Bridesmaids, cree que se ha abierto la puerta a un tipo diferente de heroína.

“No escribí un manifiesto feminista que permita a las mujeres ser tan mal portadas como los hombres, pero sí quería escribir sobre una mujer treintañera de carne y hueso, que echara una ojeada a su alrededor y dijera ‘yo no debería estar aquí’. Como dice Annie, mi personaje: ‘Soy soltera, debo 40 mil dólares y vivo con una lunática’. Tal vez no es bonito, pero los hombres se dan cuenta de que las mujeres no siempre llevan maquillaje y que a veces beben y dicen peladeces.”

Guiones como éste nunca han existido, interviene Melissa McCarthy. La actriz y productora de 41 años es candidata al Óscar por su interpretación de Megan, una exuberante mujer del Medio Oeste estadunidense. Después de todo, pregunta, ¿cuándo fue la última vez que vimos una película graciosa en la que aparecen seis mujeres que ya no son jóvenes?

Damiselas que vomitan

Las actrices de Bridesmaids se portan como damiselas británicas en pleno auge del pop: se emborrachan, vomitan e incluso defecan en la calle. Sin el respaldo del rey de la comedia gruesa, Judd Apatow, como productor, jamás se habría filmado.

“Antes de nuestra cinta, los estudios decían ‘no, no, las mujeres no son así, no quieren ver eso’ –comenta Apatow–. Era una apuesta demasiado incierta para Hollywood. Sin embargo, 70 por ciento de quienes van a ver Bridesmaids son mujeres; en alguna medida, se ven a sí mismas.”

Ahora todo el mundo quiere su propia dama deshonrosa. Siguiendo la corriente, Rebel Wilson, quien interpretó en la película a la compañera de departamento de Wiig, ha sido lanzada en un papel estelar: como una heroína apodada Cara de cerdo en la comedia Bachelorette, producida por Will Ferrell. La película, cuyo costo fue de 3 millones de dólares, hizo su debut el año pasado en el festival de Sundance. La estelarizan Kirsten Dunst, Lizzie Caplan e Isla Fisher como tres amigas horrorizadas de que su amiga fea vaya a casarse antes que ellas.

Todos estos filmes fueron escritos por mujeres; Bachelorette es de Leslye Headlan, de 30 años de edad, quien cariñosamente la describe como nihilista. Un crítico la llamó Tarantino para chicas.

Los estudios, que desde 2008 han sido renuentes a apuestas inciertas, reconocen poco a poco que los deseos del público femenino pueden ser tan sucios como los masculinos. Cortejan a Annie Mumolo, coguionista de Bridesmaids; a Melissa McCarthy y a Elizabeth Meriwether, guionista de New Girl y No Strings Attached.

¿Será que Hollywood de pronto ha descubierto lo que ellas quieren? “Históricamente, las mujeres han tenido que soplarse ocho millones de películas hechas para hombres –responde Apatow–. Creo que estamos por ver que las cosas se equilibran un poco. Y lejos de desilusionarse por ello, creo que a los tipos también les encantará ver estas películas.”

© The Independent

Traducción: Jorge Anaya