De continuarse utilizando la justicia para frenar las pretensiones políticas de los adversarios del gobierno federal, estarán en juego la viabilidad del país, la solvencia de la República y la tranquilidad de la gente, consideró la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Cámara de Diputados.

El reclamo de los legisladores priístas no fue respaldado a cabalidad por el resto de los grupos parlamentarios en San Lázaro. El Partido del Trabajo (PT) convocó a los poderes a conducirse por la ruta de la civilidad con objeto de celebrar comicios en calma, debatir ideas desterrando la denostación y las infamias. Estamos en favor del debate de las ideas y del convencimiento con la razón, adujo el coordinador de esa bancada, Pedro Vázquez González.

A su vez, Juan José Abud, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), consideró que las filtraciones relacionadas con los ex gobernadores priístas de Tamaulipas Manuel Cavazos Lerma, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández son una probadita de lo que viene.

Advirtió que “el país está en llamas. La historia nos enseña que no es la primera vez. El problema es que hoy los encargados de apagarlas son los que le están echando mas leña a la hoguera. La guerra que hoy vemos en el país también se está haciendo en lo político, no sólo con bazucas, sino con infamias, engaños y el uso inmoral de algo que debería ser sagrado: la justicia.

Colegas, los invito a que no permitamos que esta guerra se extrapole a San Lázaro; no incendiemos este Congreso, todos podemos perder, advirtió.

En tribuna, César Augusto Santiago (PRI), y entre curules su compañero Jorge Carlos Ramírez Marín, insistieron en nombre de su partido en el riesgo de la ruptura y la polarización política durante los próximos dos meses: El país necesita elecciones transparentes y confianza en los órganos de procuración de justicia. Es muy delicado, hay que tomar una definición para que el gobierno federal respete los tiempos e instancias de los partidos, la competencia, y no intervenga en ella con las instituciones del Estado.

La fracción priísta en San Lázaro se cuidó de no emitir más comentarios en torno a la investigación que se sigue a tres ex gobernadores del estado de Tamaulipas. Desde la tribuna, César Augusto Santiago advirtió de los riesgos que implica para el país y su partido mantener los ataques políticos entre las instancias que buscan el poder.

No queremos contribuir a la polarización o al desprestigio que peligrosamente vemos en la intención pueril de sacar ventaja. No debe intentarse aprovechar las instituciones de justicia en beneficio de partido alguno. Tenemos que cumplir con ecuanimidad y solvencia; pensar primero en la gente y que el país recupere su prestigio.

Para Ramírez Marín –quien aceptó comentar el tema–, su partido se encuentra sorprendido porque en lugar de operadores políticos y electorales, como ha habido siempre en las campañas, ahora vemos que hay organismos políticos que tienen ministerios públicos y que están sustituyendo sus dirigencias por la Procuraduría General de la República. El PRI ha pedido que se realice un blindaje electoral para que la impartición de justicia no tenga que ver con asuntos electorales. Es muy importante que el gobierno federal vaya definiendo cuál va a ser su actitud; no es posible que pongamos a México en riesgo de una ruptura.