Durango, Dgo., 1º de febrero. Jesús Soto Rodríguez, secretario de Recursos Naturales y Medio Ambiente de Durango, afirmó que el sector forestal del estado se encuentra en alerta sanitaria porque más de 5 mil hectáreas de árboles han muerto a causa de la sequía, y 900 hectáreas de bosques han resultado afectadas por plagas e incendios.

Explicó que en las 900 hectáreas donde se detectaron plagas por falta de humedad tendrán que derribarse los árboles y se sanearán los troncos para aprovechar la madera.

El funcionario dijo que la superficie afectada en los municipios de Durango, San Dimas y Pueblo Nuevo puede incrementarse si persiste la sequía. Las pérdidas por la plaga son millonarias, al igual que la inversión (que se requiere) para tratar de rescatar el bosque, apuntó, sin precisar montos.

Explicó que las plagas son sólo uno de los efectos secundarios de la sequía en el sector forestal y que en dos años han muerto más de 5 mil hectáreas de arbolado, superficie casi cinco veces superior a la reportada en años anteriores.

Agregó que los incendios forestales mantienen en alerta a las autoridades, pues de noviembre a la fecha han ocurrido nueve conflagraciones que consumieron 100 hectáreas. Hay muchos incendios pequeños que no se reportan, pero no deberían producirse en esta temporada, subrayó.

Por lo pronto, el pasado lunes nevó en la sierra de San Miguel de Cruces, municipio de San Dimas, lo que puede ayudar a mitigar la sequía.