Cultura
Ver día anteriorMiércoles 1º de febrero de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El estreno se realizará este viernes en el Centro Nacional de las Artes

Montan adaptación con teatro y danza de El Principito, de Antoine de Saint-Exupèry

Exploramos la vida de personas que están a punto de la debacle moral, dice el director de la obra

Foto
Escena de la obra que dirige Harif Ovalle, con actores de la agrupación Teatro que DanzaFoto Cortesía de la compañía
Foto
Escena de la obra que dirige Harif Ovalle, con actores de la agrupación Teatro que DanzaFoto Cortesía de la compañía
 
Periódico La Jornada
Miércoles 1º de febrero de 2012, p. 6

La compañía Teatro que Danza, dirigida por Harif Ovalle y Gabriela Pérez, estrenará este viernes en el Centro Nacional de las Artes (CNA) Yo maté al Principito, montaje inspirado en la obra del escritor francés Antoine de Saint Exupéry.

Mediante una combinación de teatro y danza presentan a seres devastados, sin proyecto de vida porque están lejos del amor. Son personajes que están a punto de la destrucción moral y, como el Principito de Saint-Exupéry, su corazón se encuentra destrozado.

El panorama que presento en la obra sirve de punto de referencia para abordar el tema del sentido de la vida que plantea De Saint-Exupéry en su libro. Hay una búsqueda, la necesidad de comprender este arraigo en el amor, en determinado objeto, una profesión, así como el respeto y conocimiento que tenemos hacia esa persona que amamos, expresa a La Jornada Harif Ovalle, director del montaje.

La obra está inspirada en la misteriosa desaparición en la vida real, el 31 de julio de 1944, de Antoine de Saint- Exupéry, autor del célebre libro El Principito, así como en el personaje de la Rosa, que aparece en esa entrañable historia, y en los recuerdos de un piloto alemán, influido por los pasajes emblemáticos del texto.

La desaparición de Saint- Exupéry es un enigma y esta historia sobre el piloto nazi que supuestamente enganchó el avión del autor y también confesó su admiración por Antoine me fascinó, porque el nazi mata a su ídolo, señala Ovalle.

La obra narra la historia del hombre que derriba a su propia figura y de manera simultánea presenta la vida de Saint-Exupéry y la Rosa. El cruce inesperado de los tres protagonistas revelará la necesidad de amar.

De acuerdo con el director, Yo maté al principito es una paráfrasis sobre el cuento y la vida real de Saint-Exupéry, que invita a reflexionar sobre el sentido de la vida, el amor y la soledad. El montaje habla de un hombre que busca vencer la soledad mediante el acto de amar una persona, una profesión o un dios.

El Principito enseña a los pequeños, por primera vez, la melancolía, los convierte en hombres solitarios”, añadió Ovalle.

Asimismo, “a partir de las vanguardias en el siglo XX comenzó a gestarse un nuevo perfil de artistas escénicos, debido a que no estaban satisfechos con los elementos propios que sus disciplinas (danza y teatro) les proporcionaban, por lo que comenzaron a mirar hacia otras fronteras.

Los actores empezaron a moverse, los bailarines a hablar, los artistas plásticos se bajaron de las paredes y comenzó una suerte de interdisciplina muy afortunada.

La dramaturgia de Yo maté al Principito pondera el movimiento corporal, con ciertos recursos propios del actor, como el habla y los procesos de imaginación, así como los de justificación emocional de los personajes.

Con las actuaciones de Alan Uribe, Alicia González, Alejandro d’Corzo, Ángel Lara, Mireya González, Mishell Ordóñez y Yadira Salvador, la obra se estrenará el 3 de febrero a las 20 horas en el teatro Salvador Novo del CNA (Río Churubusco y Tlalpan).