La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) intensificó el programa de verificación en las inmediaciones de la Basílica de Guadalupe para evitar abusos contra los peregrinos que acuden al recinto en esta fecha. El titular de la Profeco, Bernardo Altamirano Rodríguez, encabezó este domingo un recorrido por la zona para supervisar que los comerciantes tengan a la vista los precios de productos y alimentos. El funcionario informó que la dependencia cuenta con 150 funcionarios en las inmediaciones del recinto para verificar precios y ofrecer asesorías. Señaló que el objetivo es orientar a los proveedores y consumidores para que se cumpla con la ley y las normas vigentes. El personal desplegado supervisa que cocinas económicas, tiendas de abarrotes, farmacias, pollerías y tortillerías, así como restaurantes, hoteles y estacionamientos exhiban los montos a pagar y respeten los precios y tarifas de servicios.