La Arquidiócesis Primada de México tomará medidas de mayor control y prudencia en torno a los paquetes que se reciben tanto en la curia como en la casa del cardenal Norberto Rivera, además de que estamos negociando que a la entrada de la Catedral se coloquen detectores de metal, luego de que el pasado viernes se recibió un paquete, que contenía un libro y un supuesto petardo dirigido al jerarca eclesiástico, informó el vocero de dicha instancia, Hugo Valdemar Romero.

Aunque la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF) afirmó que luego de analizar el paquete se concluyó que no contenía ningún artefacto explosivo, la Procuraduría General de Justicia capitalina inició una averiguación previa por esos hechos, la cual está a cargo de la Coordinación Territorial Venustiano Carranza 3, aunque la dependencia no quiso dar mayor información sobre el caso, el cual calificaron de delicado.

Al respecto, Valdemar Romero señaló en entrevista que aunque no es la primera vez que ocurre, pues se dieron situaciones similares en los tiempos de Ernesto Corripio Ahumada (antecesor de Rivera Carrera), añadió que el cardenal está tranquilo y no le da mayor importancia a este asunto, aunque no lo subestima, pero tampoco nos puede paralizar.

Ayer durante la clausura de la 17 Asamblea Diocesana de la Arquidiócesis de México, el cardenal Rivera Carrera dijo a los presentes que esas situaciones no amedrentan a la Iglesia, por lo que seguirá con su labor normal.