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Poza de Cuatro Ciénegas almacenaba indicios primigenios de vida

Pierde Coahuila sistema hídrico clave para investigación biológica: experta
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El manejo inadecuado del agua en el desierto de Cuatro Ciénegas ha provocado la extinción del sistema hídrico Churince, poza que contenía aguas prehistóricas. Especialistas señalan que esta zona ha guardado por milenios información genómica de enorme relevanciaFoto Lilia Angélica Ovalle
Corresponsal
Periódico La Jornada
Martes 18 de octubre de 2011, p. 36

Torreón, Coah., 17 de octubre. El mal manejo del agua en la zona protegida de Cuatro Ciénegas provocó la extinción del sistema hídrico Churince, que contenía agua prehistórica y organismos milenarios como los estromatolitos, denunció Valeria Souza Saldívar, doctora en ecología microbiana y bióloga por la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien responsabilizó a la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Explicó que el análisis del genoma de los estromatolitos (comunidades microbianas que dominaban el planeta y fueron las principales productoras del oxígeno hace miles de millones de años) permitió el estudio de la vida fuera de la Tierra y hubiera dado la pauta para encontrar la cura a diversas enfermedades y el remedio a daños ambientales.

Para la especialista, la poza Churince era quizás la parte más importante de la reserva de Cuatro Ciénegas, pues por milenios guardó información genómica de gran relevancia. Su agua era un caldo de cultivo para la ciencia, subrayó.

“Churince era lo más parecido a Marte, pero con agua –explica Souza Saldívar–. Tenemos genomas del Churince que nos dicen que (estos microbios) estuvieron en el mar antes que cualquier organismo grande, antes que los dinosaurios, y ese lugar, que sobrevivió al menos 200 millones de años con agua, se nos fue en cinco años”, cuando empezó a bombearse agua, lamenta.

Recordó que en agosto un equipo interdisciplinario de 30 investigadores y ocho universidades nacionales y extranjeras comprometidas con la preservación de Cuatro Ciénegas realizó un diagnóstico en el cual se advertía que Churince comenzaba a morir.

En su más reciente visita a la zona, el 13 de octubre, confirmó el ecocidio. Lo que hay ahora es un tapete de peces muertos, rasguños de tortuga en el fango tratando de buscar el agua, los estromatolitos al sol. Eso está muerto, afirmó.

No obstante, la investigadora considera que si se impone una veda en la región Cuatro Ciénegas-Ocampo y se cumple la vigente en el Valle del Hundido, además de cerrar el canal de La Becerra, se puede preservar lo que queda.

Interrogada sobre la postura de las autoridades, responde que Luis Fueyo MacDonald, titular de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, se encuentra confundido porque el director de la Conagua, José Luis Luege Tamargo, se comprometió a cerrar las compuertas de La Becerra para inyectar agua a Churince.

Aunque la medida se aplicó el primero de septiembre, cinco días después la compuerta fue reabierta con toda impunidad. Engañaron a Luis Fueyo, a quien Luege Tamargo prometió recargar el ecosistema con 200 metros cúbicos de agua por segundo y no cumplió. Era una medida de emergencia y ni siquiera eso pudieron cumplir, acusó.

Cuatro Ciénegas es un sitio protegido por la Organización de Naciones Unidas para el Educación, la Ciencia y la Cultura y por la Convención de Ramsar, entre otros instrumentos.

Ambientalistas en la región Laguna de Coahuila han señalado que para salvar el sistema Churince es necesario proscribir la siembra de alfalfa en Cuatro Ciénegas, específicamente en el Valle del Hundido.

Sin embargo, los intereses de la industria lechera se impusieron: en el Valle del Hundido se permite una extracción de 20.15 millones de metros cúbicos de agua.

La investigadora universitaria creó el blog souzacuatrocienegas, en el que solicita que los ciudadanos firmen una petición de protección ambiental que se hará llegar al presidente Felipe Calderón, al director de la Conagua y a los secretarios de Medio Ambiente y Agricultura, pues considera que lo ocurrido a Churince es una vergüenza nacional.