Las mantas y espectaculares con la imagen del secretario del Trabajo y Fomento al Empleo, Benito Mirón Lince, no son de un homónimo y fueron colocadas por organizaciones simpatizantes, por lo que no me toca a mí retirarlas del mobiliario urbano, parques o jardines, como instruyó el gobierno local, y menos de los 200 autobuses que la portan, porque son propiedad privada, afirmó.

Durante la entrega de 183 chalecos a igual número de franeleros en la delegación Álvaro Obregón, aclaró que no he colocado ninguna propaganda, aunque sí es mi imagen la que se promociona en diversos puntos de la ciudad, pero esta situación creció anárquicamente desde la propia Asamblea Legislativa, con la publicidad de sus propios diputados.

El número de mantas del secretario del Trabajo es mucho menor respecto de otros compañeros, pero su retiro dependerá de los delegados, aunque la medida no tiene fundamento, sobre todo cuando la denuncia presentada por la diputada federal Gabriela Cuevas contra cuatro funcionarios para quitar su propaganda se rechazó, explicó.