Un clásico americano

HUGO CIFUENTES (Otavalo, 1923-Quito, 2000) es el fotógrafo más conocido de Ecuador, y figura central en la tradición latinoamericana. Con un olfato popular lleno de humor y empatía con la gente de su tierra, en más de un sentido hace pensar en su contemporáneo Nacho López. Urbano y rural, artista y periodista, dotado de un sentido de la composición y la oportunidad que confirman que en fotografía también existe la inspiración.

El libro Hugo Cifuentes (Dinediciones, Quito, 2010), editado por su hijo el también fotógrafo Diego Cifuentes, refleja una apasionada reconciliación filial. Reúne las tomas más divulgadas del autor con otras menos conocidas, primordialmente en las montañas andinas y los pueblos kichwas. Además, y es la principal novedad, ofrece una amplia muestra del trabajo gráfico de Cifuentes padre: tintas, acuarelas y dibujos que confirman su genio para la composición y para la escenificación de la vida real.

Conocido en México por el volumen Sendas de Ecuador (Río de Luz, Fondo de Cultura Económica, 1988) y apreciado por nuestros lectores a lo largo de dos décadas, es un precursor continental decisivo y piedra angular de la fotografía ecuatoriana.