En medio de una numerosa concurrencia y un ambiente festivo, la noche del martes fue inaugurada la muestra La reina roja: homenaje a Beba Pecanins, en el Museo Universitario del Chopo, de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Fue una velada emotiva y entrañable, en la que la memoria de Ana María Beba Pecanins, quien falleció en febrero de 2009, logró convocar a decenas de familiares y amigos, entre ellos artistas de diversas disciplinas y personajes de los ámbitos político, social y cultural, con predominio de los de sexo femenino.

Estuvieron las escritoras Margo Glantz y Laura Esquivel, el arquitecto Teodoro González de León, la compositora Marcela Rodríguez, el pintor Manuel Felguérez, la cantante Betsy Pecanins, la violonchelista Jimena Giménez Cacho; las actrices Pilar Pellicer, Julieta Egurrola y Lilia Aragón, así como la presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), Consuelo Sáizar, entre una larga lista.

La atmósfera en el recinto era exultante, más propia de un guateque que de una ceremonia protocoloria. Nada de discursos oficiales ni solemnes.

Fue una reunión de amigos, un festejo, en el que hubo música en vivo, un performance, pero ante todo la oportunidad de convivir mientras se disfrutaba de una copa de vino tinto o un caballito con tequila. El lugar reverberaba como de un avispero.

Astrid Hadad, en la parte musical

La parte musical estuvo a cargo de Astrid Hadad, quien interpretó La tequilera y El calcetín, para luego lanzar vivas en honor a la Beba Pecanins y recordarla como la ONU de la amistad, pues nadie como ella para ayudar a resolver los conflictos entre los amigos.

Esa actuación sirvió de marco para un performance de Montserrat Pecanins, madre de la Beba, que consistió en dotar de mascadas rojas a las asistentes, quienes se las colocaron a manera de velo y se las quitaron en cuanto la cantante concluyó su actuación.

Entre esas mujeres se encontraban varias de las 120 que participaron en la elaboración de las máscaras que integran la muestra, todas amigas de la fallecida pintora y escenógrafa.

El performance fue una metáfora sobre la necesidad de que las mujeres se atrevan a liberarse de atavismos, alusión a la máscara de la Reina Roja, el personaje femenino cuyos restos fueron encontrados en la zona arqueológica de Palenque, Chiapas, recubiertos de cinabrio y ricamente ataviados.

Esa ancestral gobernante, de la cual se desconoce todo dato, sirvió de inspiración para la exposición, concebida por Beba Pecanins como un homenaje a las mujeres valerosas y pensantes, así como una reflexión contra el machismo y la violencia de la que hasta la fecha es víctima el género femenino.

Sólo hubo unas breves palabras de la directora del museo del Chopo, Alma Rosa Jiménez, quien contó que la exposición estaba proyectada en ese recinto desde antes de la muerte de Beba Pecanins y sostuvo que el amor y el compromiso de la familia lograron sacarla avante esa propuesta y concretarla.

Montserrat Pecanins, visiblemente emocionada, expresó su agradecimiento a todas las personas que hicieron posible la muestra, en especial a las 120 reinitas que elaboraron y decoraron las máscaras.

Ésta es una obra de arte colectiva, definió, pero sobre todo un gran abrazo de cariño y amistad: Esta exposición es en realidad de todos nosotros.

La Reina Roja: homenaje a Beba Pecanins concluirá exhibición el 28 de noviembre, en el recinto de Dr. Enrique González Martínez 10, colonia Santa María la Ribera.