Uganda podría ser el próximo país perjudicado por las alarmantes tasas de desnutrición generadas por la sequía que ya diseminó la hambruna en el sur de Somalia y provoca problemas de alimentación en Kenia, Etiopía y Yibuti, advirtió el martes la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Ya se detectaron casos de escasez de alimentos en las zonas afectadas por la sequía en el norte de Uganda, que es la tercera economía del este de Africa, señaló la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

Uganda podría ser el próximo país golpeado por el mismo tipo de desnutrición alarmante y condiciones de sequía, expresó Sandra Avilés, de la FAO, en conferencia de prensa.

Actualmente, alrededor de 600 mil personas en la región norte de Uganda –propensa a las sequías– enfrentan inseguridad alimentaria moderada, lo que corresponde a una fase dos en una escala de la ONU en la que el nivel cinco significa hambruna, dijo la funcionaria. Las condiciones de sequía deben monitorearse, porque se expanden como el fuego sin control, añadió Aviles.

En dos regiones del sur de Somalia ya se declaró la hambruna, y se prevé que pronto se sumarán al menos seis zonas más de esa nación, dijo el lunes el jefe humanitario de la ONU.

Unos 12.4 millones de personas en Kenia, Etiopía, Somalia y Yibuti ya están muy necesitadas de ayuda debido a la peor sequía en 60 años, señaló la funcionaria de Naciones Unidas, Valerie Amos, en Nueva York.

El organismo internacional pidió el martes a las compañías aéreas de transporte que brinden la posibilidad de llevar de manera gratuita o con importantes descuentos alimentos para los niños hambrientos de la región. Hay más de 2.3 millones de niños con desnutrición aguda en África. Más de medio millón morirán si no reciben ayuda, advirtió Marixie Mercado, del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

Decenas de miles de somalíes ya murieron de hambre o debido a enfermedades causadas por la desnutrición, la mitad de ellos niños menores de cinco años.