Acapulco, Gro., 5 de junio. Integrantes de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) reconocieron que el modelo de policía comunitaria enfrenta dificultades porque el número de poblados que adoptan este sistema va en aumento y requieren que las autoridades les den orientación, capacitación y equipo.

Añadió que la CRAC teme campañas de propaganda en contra del sistema de seguridad comunitaria, pues no es bien vista por los poderes fácticos y los intereses que representan.

Agregó que no han sido invitados a participar en el mando policial único propuesto por el gobierno federal, pero es difícil que se incorpore porque ello rompería con la forma de organización de las comunidades.

La policía comunitaria, explicaron, es una alternativa para enfrentar la creciente violencia que azota al país, pues se basa en la autogestión de los pueblos.

La CRAC fue fundada en diciembre de 1995 por habitantes de poblados indígenas de las regiones Montaña y Costa Chica de Guerrero. Actualmente se compone de 700 elementos, la mayoría mixtecos, tlapanecos y mestizo, así como de tres casas de justicia.

Pablo Guzmán Hernández, uno de los 10 coordinadores regionales de la CRAC nombrados por la Asamblea General de los Pueblos, integrada por representantes de 63 comunidades de 10 municipios de la Costa Chica y la Montaña, explicó que en 15 años han disminuido hasta en 90 por ciento los homicidios, violaciones, el abigeato y otros delitos en la región donde opera la CRAC.

Guzmán Hernández enfatizó: No podríamos decir que la Policía Comunitaria es un ejemplo, porque tenemos errores, pero sí es una alternativa que ha estado funcionando.