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Carecen de escrituras muchos de los condóminos, reconoce Prosoc

En situación irregular, la mitad de las unidades habitacionales
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La ocupación irregular de áreas comunes es un problema generalizado en las unidades habitacionales de la ciudad de MéxicoFoto María Meléndrez Parada
 
Periódico La Jornada
Martes 31 de mayo de 2011, p. 37

La necesidad de contar con un techo donde vivir, instalar un negocio o ampliar la casa ha llevado a la ocupación ilegal de áreas comunes y de estacionamiento en unidades habitacionales, que son usados como viviendas, talleres de carpintería, tiendas y hasta caballerizas, aunque el problema mayor es que casi la mitad de las 7 mil 254 unidades están en situación irregular.

La compra-venta entre particulares o familiares sin mediar un documento oficial, el intestado o la desidia han provocado que gran parte de los 2.5 millones de personas que habitan algunas de las 582 mil viviendas en esos espacios, estén de manera irregular, al carecer de una escritura que avale su propiedad, reconoció la procuradora social, Dione Anguiano.

Por esta razón, la Prosoc pondrá en marcha en junio un programa para la regularización patrimonial y documental en unidades habitacionales, donde vive uno de cada cuatro habitantes en la ciudad, con una inversión de 21 millones 560 mil pesos.

Se atenderán también problemas como la ocupación ilegal de espacios comunes o estacionamientos, señaló la funcionaria, quien destacó que el mayor número de unidades se concentra en las delegaciones Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo, Venustiano Carranza y Azcapotzalco, aunque por densidad de población están Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Azcapotzalco.

A 38 años de construirse, los habitantes de la Unidad Margarita Maza de Juárez, en la delegación Iztapalapa, no sólo se enfrentan a la ocupación de áreas verdes para la ampliación de jardines o departamentos, sino también de cajones de estacionamiento, que son delimitados con mallas para servir de talleres mecánicos, carpinterías, tiendas y hasta de caballeriza. Desde hace 2 meses, los relinchos y moscas generadas por las heces de un caballo han alterado su vida.

Pisos dañados por las raíces de árboles, impermeabilización y el combate a la inseguridad fueron otros reclamos que compartieron con habitantes de la Unidad La Norma, donde el mayor temor es perder nuestro departamento. Mucha gente falleció sin dejar testamento, están divorciados, se hicieron de él por traspaso.