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La escritora presentó el libro con su coautor, Federico Traeger

Pasión hasta las últimas consecuencias, eso es Amores adúlteros: Beatriz Rivas
 
Periódico La Jornada
Domingo 20 de febrero de 2011, p. 4

Él y ella, cada quien en su cama, los dos con vidas separadas y viviendo lo que se llamaría un amor prohibido. De eso se trata la novela Amores adúlteros, presentada en una especie de concierto-lectura dramatizada-preguntas del público, que se realizó el jueves por la noche.

Sobre el escenario, en la Fundación Sebastián, los autores Beatriz Rivas y Federico Traeger dieron vida a los personajes (que sólo son Él y Ella) en una función que comenzó con 45 minutos de retraso. Antes de la lectura dramatizada, Moneda al aire interpretó algunas canciones relacionadas con la temática del libro, publicado por Alfaguara.

Él y Ella –en voz de los coautores– se desean y llevan dos semanas de abstinencia. Se necesitan, pero los dos tienen pareja. Que al final de cuentas, como dijo el moderador Fernando Rivera, la función del matrimonio es mantener viva la llama del adulterio.

Escribimos Amores adúlteros de manera mágica, en el sentido de que nunca lo planeamos. Federico vive en Houston, yo aquí, y se enteró de que doy talleres de creación literaria y me pidió que le diera un taller a distancia.

Cuenta Federico: “Me dijo que sí era posible hacerlo, me pidió que hiciera un ejercicio precisamente acerca del adulterio; me dijo: ‘escribe tu cuento y veremos’. Creo que me puso una prueba para ver si pasaba o no.

“Escribí el cuento, se lo mandé, pasaron como 10 días y no sabía nada de ella, dije: ‘bueno, ya no le latió’. De repente, como al onceavo día (sic) me contestó: ‘me gusta mucho el cuento’, y que se tomó la libertad de sacar algunas frases del contexto y organizarlas de tal forma que ella le añadió de su cosecha y empezó a darse una historia interesante, que no teníamos ni idea de qué se trataba.

Simplemente eran dos personajes y, como dice ella, de manera mágica, nunca decidimos que fueran dos personas sin nombre, sin edad, sin país de procedencia: sólo él y ella; a partir de ahí se fue dando solito.

Un lector de la obra de Beatriz Rivas le preguntó acerca del tema de los amores prohibidos que, dijo, se observa como constante en la obra de la escritora mexicana.

Lo que me gusta de esta novela es que no es que sea un amor prohibido, sino esa pasión del amor, ese vivir los amores hasta sus últimas consecuencias, que pueden ser adúlteros o no, de novios, esposos, parejas.