La comunidad académica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) continúa manifestando su descontento por los términos de la convocatoria 2011 del Programa de Primas al Desempeño del Personal Académico de Tiempo Completo (PRIDE), que pretenden dañar parte del salario de docentes e investigadores. Solicitaron su suspensión y emitir otra propuesta.

Miembros de la Facultad de Filosofía y Letras (FFL), de los institutos de Fisiología Celular (IFC), de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación Superior (IISUE) y de Investigaciones Bibliográficas (IIB), entre otros, y representantes sindicales del personal docente han hecho llegar a la rectoría inconformidades por escrito, firmadas por unos 70 académicos cada una, donde manifiestan su inquietud por las modificaciones.

La movilización y presión docente por este tema ocasionó que el abogado y el secretario general de la UNAM, Luis Raúl González Pérez y Sergio Alcocer Martínez de Castro, respectivamente, se reunieran con varios de los sectores inconformes.

Trascendió que las quejas propiciaron que las autoridades universitarias contemplen una posible contrapropuesta a la convocatoria del PRIDE –publicada el pasado 13 de diciembre y con vencimiento el 28 de enero–, la cual se presentaría en los próximos días.

El 22 de enero La Jornada reportó que en la comunidad académica universitaria existía malestar por la reciente convocatoria de ese programa, pues se le percibe como un intento de reducir los estímulos salariales al sector académico, que representan entre 45 y 115 por ciento más sus ingresos.

El lunes 31 de enero, la Dirección General de Asuntos del Personal Académico (DGAPA) –dependiente de la Secretaría General de la UNAM– publicó en la Gaceta de la Universidad una ampliación en el plazo para el registro de solicitudes y entrega de documentos para el 11 y 14 de febrero, respectivamente.

Docentes, investigadores y técnicos académicos señalaron que éste es un intento por ganar tiempo, ya que se les ha enviado el mensaje de no hacer olas porque el conflicto pronto se arreglará.

La Asociación Autónoma de Personal Académico de la UNAM envió una misiva al rector en la que manifiesta su inconformidad por los cambios al PRIDE por el efecto en las percepciones económicas para ese sector. La inquietud que se ha despertado en la comunidad podría desencadenar un problema mayor que desestabilizara nuestra universidad.

En sendos escritos dirigidos al rector José Narro Robles, las comunidades de la FFL y del IISUE señalaron que la actual convocatoria asienta que los estímulos son beneficios adicionales que no forman parte del salario nominal. Contra ese argumento los académicos de ambas instancias subrayaron que el artículo 84 de la Ley Federal del Trabajo establece: El salario se integra con los pagos hechos en efectivo por cuota diaria, gratificaciones, percepciones, habitación, primas, comisiones, prestaciones en especie y cualquier otra cantidad o prestación que se entregue al trabajador.

La delegación académica en el STUNAM del IISUE y del IIB acordaron colocar una manta en la que manifestaron su rechazo a las modificaciones al PRIDE.

La comunidad del IFC advirtió que el complemento económico del PRIDE se ha convertido en parte integral y fundamental de la economía del personal académico de tiempo completo, a la cual accede a través de un proceso que evalúa su productividad. La convocatoria 2011 ya no se enmarca ni en el espíritu ni en la intención que motivaron su creación, sino en lineamientos que vulneran la economía de este sector.