El PRD capitalino desechó cualquier posibilidad de aliarse con el PAN en el Distrito Federal para las elecciones de 2012 ante la sola presunción que formuló el lunes el dirigente local panista Obdulio Ávila, de valorar esa posibilidad por el éxito de las alianzas en Oaxaca, Puebla, Sinaloa y Guerrero.

El presidente del PRD DF, Manuel Oropeza, dijo que es inconcebible una alianza con un partido que ha combatido la política social de los gobiernos perredistas en la capital del país, así como el avance de los derechos y libertades de las mujeres y los grupos de la diversidad sexual.

Por separado, el titular de Desarrollo Social y dirigente de la corriente Izquerda Social (IS), Martí Batres, aseveró que una alianza con el PAN sería tanto como entregar lo que queda de la izquierda mexicana.

Aquí no vamos a trabajar para darle oxígeno a una fuerza política que ha hundido a México en el peor de los descréditos, colocándolo en una prolongada crisis económica, política, social y moral; que arroja 10 millones más de pobres y 35 mil muertos.

Oropeza Morales dejó en claro que su partido solamente construirá una alianza política, social y electoral con otras fuerzas progresistas de izquierda ,como el PT y Convergencia.

No creemos y no apostamos al gatopardismo ni a la simulación, señaló. Y al afirmar que el PAN es lo mismo que el PRI –partidos del neoliberalismo al servicio de la oligarquía económica y las mafias del poder–, apuntó que un cambio de fondo no se logrará con la alternancia entre partidos de derecha, como ya mostró el gobierno de Vicente Fox en 2000.

Ávila dijo que los panistas capitalinos valorarán la estrategia de las alianzas de su partido con el PRD para definir las posibilidades de pensar en una alianza electoral para los comicios de 2012, lo que necesariamente implicaría buscar al mejor ciudadano o ciudadanos.

Oropeza dijo que el PRD propondrá a los capitalinos en 2012 consolidar un proyecto que promueva la igualdad y la equidad social, las libertades individuales, los derechos sociales, la democracia participativa, los derechos ambientales, la transparencia, la rendición de cuentas, la austeridad gubernamental y alcanzar los derechos plenos para la ciudad y sus habitantes.

De allí que consideró imposible una alianza con el partido que, además de oponerse a esas libertades y derechos, promovió en 2005 desde el gobierno federal el desafuero de Andrés Manuel López Obrador. “Un proyecto popular y de izquierda –agregó– es lo que seguramente seguirá consolidándose en el Distrito Federal por la voluntad libre de sus ciudadanos.”