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En Morelos, Guerrero y estado de México se le brindaba protección

El Grande pagaba de 5 mil a 10 mil pesos mensuales a policías de tres entidades
 
Periódico La Jornada
Lunes 20 de septiembre de 2010, p. 7

El ex policía Sergio Villarreal Barragán, El Grande, quien hasta antes de ser detenido disputaba el liderazgo del cártel de los hermanos Beltrán Leyva, pagaba entre 5 mil y 10 mil pesos mensuales a policías municipales de Morelos, Guerrero y estado de México para que le brindaran protección personal y le permitieran operar en esas entidades sin ser capturado, según versiones de testigos protegidos por la Procuraduría General de la República (PGR).

En la averiguación previa SIEDO/UEIDCS/008/2007, a la que se tuvo acceso, se indica que Villarreal Barragán, detenido el pasado 12 de septiembre en Puebla, estaba bien protegido por los cuerpos policiacos de varias ciudades turísticas ubicadas en esos tres estados, entre ellas Acapulco, Ixtapa Zihuatanejo y Cuernavaca.

Incluso, los testimonios recabados en esa indagatoria refieren que por orden de El Grande algunos policías locales cerraban el tránsito en las calles aledañas a algún bar o antro que el capo de la droga acostumbraba visitar.

Un sicario de los Beltrán Leyva, detenido días atrás, solicitó a la PGR el beneficio de ser testigo protegido y bajo el nombre clave de David relató que había una nómina mensual que Villarreal Barragán pagaba a los policías municipales de diversos estados. Los pagos variaban según el cargo. A los policías les mandaba 5 mil pesos, a algunos jefes y comandantes policiacos, lo doble. (...) Esto lo hizo principalmente con policías de Morelos, de Guerrero y del estado de México, al menos desde 2008, refirió el testigo.

Otro colaborador de la PGR, identificado como Mario, aseguró que las amistades que hizo El Grande en círculos policiacos, durante el tiempo que trabajó en diversas corporaciones municipales, le permitieron contar con la protección de ex compañeros, y por ello pudo recibir pitazos que le advertían de algún operativo destinado a su captura.