El presidente Felipe Calderón aseguró que las amenazas no le quitan el sueño. Eso sólo lo hace el café y algunos temas de gobierno complejos y difíciles. Los riesgos son inherentes al cargo, pero tengo muy buena protección, dijo en una entrevista con Radio Caracol, de Colombia.

Durante la visita a ese país, adonde asistió a la asunción del presidente Juan Manuel Santos, el mexicano dijo que la falta de una policía nacional, como la que tiene Colombia, ha obstaculizado la lucha contra el crimen organizado en México. En las actuales circunstancias se da un enfrentamiento desigual, entre otras razones, porque las autoridades están impedidas para destituir a elementos coludidos con los delincuentes.

Así, dijo, aunque el esfuerzo recae en el gobierno federal que trabaja con el apoyo del Ejército y casi 33 mil elementos de la Policía Federal, en el ámbito estatal y municipal están 430 mil policías, sobre los cuales es imposible marcar directrices disciplinarias, logísticas y estratégicas.

Esto hace una enorme diferencia con la estrategia en Colombia en el combate al narcotráfico. Calderón dijo que ha pensado en reformar la policía, pero en México impera el espíritu federalista. Explicó que se ha avanzado en impulsar por lo menos 32 policías estatales que respondan a criterios homogéneos de confiabilidad.

En el rubro global, comentó sobre la crisis entre Colombia y Venezuela y la importancia de que los países que creen en la democracia y en la libertad convengan en que nadie puede actuar en la ilegalidad y menos por la vía armada.

Sobre la acusación del presidente saliente, Álvaro Uribe, de que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia tienen campamentos en Venezuela y contacto con autoridades de ese país, Calderón subrayó la importancia del diálogo y de que, en todo caso, se constate lo que dijo Uribe y se haga lo correspondiente.

Lo primero es hablar con la verdad y apoyarse en instrumentos como la Organización de Estados Americanos, indicó.

Antes comentó sobre la convocatoria que hizo a los actores políticos para participar en un diálogo nacional sobre la estrategia contra el crimen organizado y nuevamente se lanzó contra los partidos de oposición que no han respondido. Ésta debe ser una política de Estado y no, como han asumido algunos actores, una estrategia del Presidente. Sí es mía porque estoy comprometido con México; pero no puede ser sólo mía.

Se refirió a “los líderes políticos que dicen: ‘el Presidente y su lucha, el Presidente y su política, el Presidente y su estrategia’. No, señores: éste es un problema de Estado y debe ser asumido como política de Estado” que se resolverá sólo con esfuerzos conjuntos.

Planteó que en México se debe conocer que sólo cuando Colombia se decidió a confrontar con determinación a los criminales, éstos empezaron a ceder y el Estado a ganar. En la medida que se toleró el comportamiento criminal su expansión y se evitó confrontarlo, por miedo, complicidad, corrupción o negligencia, en esa medida creció el poder de los criminales.

Si el problema no se enfrenta con determinación, no se pagan los costos ni se corren riesgos, la alternativa es simplemente entregar el país a los criminales y yo no lo voy a permitir, apuntó.

Calderón habló sobre el papel que Estados Unidos ha tenido en el aumento de la violencia en México, luego de que en 2004 liberó la venta de armas de asalto. En los pasados tres y medio años se han decomisado 85 mil armas, incluyendo casi 50 mil rifles de asalto, AK-47 y R-15; así como 6 mil granadas, 10 millones de cartuchos y decenas de fusiles Barret 50, los cuales son capaces de penetrar cualquier blindaje.

Sobre la crisis entre Bogotá y Caracas, el periodista Darío Arizmendi le solicitó un mensaje para el presidente venezolano, Hugo Chávez. El mexicano le dijo que América Latina necesita a todos los líderes trabajando juntos en el camino de la responsabilidad y “en la defensa de los principios que compartimos: la democracia, la libertad, el respeto mutuo y la justicia.

Nuestros pueblos han sufrido mucho y tienen muchas carencias... y toda la energía que pudiéramos tener... más allá de nuestras naturales debilidades o fortalezas, debe emplearse para saldar el atraso en el que viven nuestras gentes. El problema entre Venezuela y Colombia ya debe quedar atrás, subrayó.

Recursos estadunidenses

Por la mañana Calderón habló con congresistas de Estados Unidos, encabezados por el demócrata Eliot Engel, a quienes solicitó esforzarse para limitar los obstáculos que impiden la llegada eficiente de los recursos de la Iniciativa Mérida a México. Las partes reconocieron el buen nivel de cooperación [bilateral] en el combate a la delincuencia trasnacional. Después, se reunió con el primer ministro de Aruba, Michael Godfried Eman, y con Álvaro Uribe. Con éste resaltó que durante su gobierno México y Colombia lograron una efectiva colaboración en seguridad y en la lucha contra la delincuencia trasnacional.