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Asimetría de precios, la causa; Televisa-Nextel ofrecen 10 veces menos que otras firmas

Licitación 21 de espectro radioeléctrico puede declararse desierta: especialistas
 
Periódico La Jornada
Lunes 19 de julio de 2010, p. 23

La asimetría de precios en la licitación 21 de espectro para servicios de telecomunicaciones da elementos suficientes al gobierno mexicano para declarar desierto ese concurso, aseguró José Pileggi, ex presidente de la Comisión Interamericana de Telecomunicaciones.

En esa licitación, para la frecuencia de 1.7 gigahercios (Ghz), el grupo Televisa-Nextel ofrece 180 millones 300 mil pesos por un bloque de 30 megahercios de cobertura nacional, y otros participantes mil 300 millones por un bloque de 10 Mhz de cobertura regional, aproximadamente 10 veces más que Televisa-Nextel por menos espectro.

Ramiro Tovar Landa, académico del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), manifestó que con los resultados de la licitación 20, para la banda de 1.9 Ghz, cerrada la semana pasada, la gran ganadora fue Telefónica Movistar, debido a que adquirió dicha cantidad de espectro, lo cual le permite competir en igualdad de condiciones con Telcel, la empresa más importante de Carlos Slim.

Destacó que Telefónica se hizo de al menos 30 Mhz en la región nueve, la más valiosa para los operadores, debido a que abarca el Distrito Federal, el estado de México, Morelos e Hidalgo, zonas de altas concentraciones urbanas y consumo.

Tovar expresó: el resultado de la licitación hace que la tenencia de espectro de Telefónica se iguale con la de Telcel. Si el objetivo fue emparejar la tenencia de Telefónica respecto de sus competidores, se logró debido a que antes de esa licitación Telefónica era la que menos espectro utilizable tenía para uso celular en las regiones cinco, seis, siete, ocho y nueve.

Se da por concluida la licitación 20

La Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) dio por concluida la licitación 20 la semana pasada, pero la 21, la más reñida, continúa por lo menos 20 rondas más, de acuerdo con el calendario anunciado por el regulador.

Sin embargo, el especialista en telecomunicaciones José Pileggi indicó que el gobierno mexicano tiene elementos suficientes para declarar desierta la licitación en la frecuencia de 1.7 Ghz, debido a que entre la oferta de Televisa-Nextel por 30 Mhz de cobertura nacional y la de otros operadores por cada uno de los tres bloques de 10 Mhz de cobertura regional hay una enorme asimetría, que provocará distorsiones en el mercado.

Es importante que después de 109 años, abundó, el gobierno mexicano haya logrado lanzar una nueva licitación de espectro, porque es un bien indispensable para la industria. Sin embargo, existen fallas, como que se haya quedado un bloque desierto por las condiciones que se fijaron para acceder a él. Por otro lado, se está ofertando una cantidad que rebasa apenas el mínimo esperado y en otros bloques los interesados se están despedazando.

El resultado, apuntó, es que no participaron todos los que se esperaba, el gobierno no recibirá todo el dinero que debería, no habrá competencia debido a que hay diferencia en los precios de entrada, y eso va en contra de los planes de negocios de las empresas, y en consecuencia no se podrán esperar mejores tarifas y servicios para los consumidores.

Pileggi destacó que la asimetría generada en esa licitación podría afectar a los concursantes en el mercado de valores, debido a que la mayoría son participantes importantes ahí. El mercado de valores podría ser sensible ante anuncios de esa magnitud, porque los interesados cotizan fuerte en la bolsa. Podría ser que no tuvieran aceptación, porque van a tener que cubrir recursos para pagar por un bien por el que otro va a dar 10 o 20 veces menos, y en un plan de negocios representa desventaja.

La solución, aseveró, sería que Televisa-Nextel igualara el precio al del bloque mejor pagado, pero eso es muy difícil, por lo que el Estado podría declarar desierta la licitación, al tener una afectación real que puede demostrar y hacer una nueva convocatoria. Enfatizó que para próximas licitaciones el regulador debe escuchar de forma oportuna los mensajes de la industria para evitar que se tribunalicen, porque entonces salen del ámbito de las telecomunicaciones.