Miami, 14 de julio. Alrededor 3 mil personas dieron el último adiós en Miami a la cantante cubana Olga Guillot, La reina del bolero, quien falleció este lunes de un infarto a los 87 años.

Banderas cubanas ondearon al paso del cortejo fúnebre, que se detuvo en los restaurantes Versailles y La Carreta, que solía frecuentar la artista.

Los restos de Guillot, que durante su brillante trayectoria ganó 10 Discos de Platino y 14 de Oro, serán velados en la iglesia Saint Michael, en la Pequeña Habana.

Amigos, familiares y admiradores hicieron una larga fila de casi un kilómetro para rendirle tributo con coronas de flores y tarjetas al cadáver expuesto de la reconocida cantante.

Al velorio asistieron el alcalde de Miami, Tomás Regalado; las cantantes Olga Chorens, Annia Linares y Flor de Loto y se esperaba también la presencia de Gloria y Emilio Estefan, así como otros artistas.

La intérprete de temas como Miénteme, Tú me acostumbraste, Sabor a mí y La gloria eres tú, y quien cantó junto a Frank Sinatra y Edith Piaf, fue la primera cantante latina que se presentó en el Carnegie Hall en Nueva York.

La misa a cargo del arzobispo de Miami, Thomas Wenski, y del obispo auxiliar Agustín Román, se realizará el jueves y ese mismo día se efectuará el entierro en un acto privado.

La cantante, conocida también por sus temas Cuando estoy contigo, Soy tuya, La noche de anoche y Lágrimas negras, llegó a Estados Unidos en la década de los 60, luego de la victoria de la Revolución Cubana.

Su activismo en favor de los exiliados cubanos la llevó a participar en actos para pedir la liberación de los disidentes políticos en la isla.