Economía
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Detecta la unidad de inteligencia financiera transacciones inusuales y preocupantes

Sustenta Hacienda 7 mil 854 expedientes sobre operaciones de lavado de dinero
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Decomiso de dinero en Culiacán, SinaloaFoto Víctor Camacho
 
Periódico La Jornada
Domingo 27 de junio de 2010, p. 25

Por primera vez, desde su creación en mayo de 2004, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), dependiente directa de la oficina del secretario de Hacienda, consolidó los expedientes de 7 mil 854 nuevas personas que han realizado operaciones inusuales y preocupantes presuntamente de lavado de dinero en varias instituciones del sector financiero mexicano.

El secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, informó que en el sistema bancario mexicano existen más de 10 mil millones de dólares anuales que no corresponden con la actividad productiva del país, es decir, que provienen presuntamente de actividades de blanqueo de dinero.

El lavado de dinero es explicado como el proceso para ocultar o disfrazar la existencia, el origen, o el uso de recursos generados a través de actividades ilícitas a efecto de integrarlos en la economía con apariencia de legitimidad.

Informes del organismo central nacional para recibir, analizar y difundir reportes de operaciones inusuales y otra información relacionada con un posible lavado de dinero y financiamiento al terrorismo, precisaron que estos expedientes consolidados pertenecen a personas que han efectuado operaciones relevantes, inusuales y preocupantes, pero no solamente en una institución financiera sino en diversas figuras del sistema financiero nacional.

Al cierre del primer trimestre del año, según los últimos datos disponibles, el número de operaciones inusuales fue de 12 mil 80, cifras que representan casi la tercera parte de las operaciones reportadas en todo 2007, primer año de gestión de la actual administración gubernamental, cuando se detectaron 38 mil 400 operaciones de este tipo. Los reportes inusuales son enviados dentro de los 30 días naturales siguientes a la detección de la operación.

Las operaciones inusuales son aquellas en la que la conducta o comportamiento que no concuerde con la actividad conocida o declarada por el cliente, o con su patrón habitual de comportamiento transaccional, en función al monto, frecuencia, tipo o naturaleza de la operación de que se trate, sin que exista una justificación para dicho comportamiento, o bien, aquella que por cualquier otra causa, las entidades consideren que los recursos pudieran estar destinados a favorecer, prestar ayuda, auxilio o cooperación de cualquier especie para la comisión de los delitos de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo.

La UIF también reportó la detección de 35 operaciones preocupantes, durante el periodo enero-marzo de 2010, con lo que de continuar con esta tendencia a lo largo del año, superarían las 119 registradas en todo 2009.

Las operaciones preocupantes son aquellas en los que directivos, funcionarios, empleados y apoderados respectivos de las entidades financieras, que por sus características, pudieran contravenir o vulnerar la aplicación de lo dispuesto en la ley o aquella que por cualquier causa, resulte dubitativa para las entidades.

De acuerdo con la guía para prevenir el lavado de dinero, las autoridades enumeran una serie de comportamientos que se pueden detectar en el sector bancario como: Apertura de múltiples cuentas por la misma persona, en las cuales se hacen numerosos depósitos por montos de baja cuantía, que en conjunto no corresponden con los ingresos esperados del cliente.

Aumentos sustanciales de depósitos en efectivo o en instrumentos negociables realizados por un despacho profesional o empresa, utilizando las cuentas abiertas a nombre de un tercero, especialmente si los depósitos se transfieren rápidamente a otra cuenta del cliente. Diversas personas realizan depósitos en efectivo en una misma cuenta, sin razón comercial o legal aparente.

Clientes que en un mismo día realizan varios depósitos, por importes individuales menores al equivalente a 10 mil dólares, y que sumados exceden o igualan dicho monto, y cuya actividad no justifica esa práctica operativa.

Usuarios que reiteradamente solicitan cheques de caja, órdenes de pago o cheques de viajero, por montos considerables sin razón aparente y pagando en efectivo, entre otros.