Estados
Ver día anteriorLunes 21 de junio de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Según investigaciones de la PGR, ex asesor de seguridad de Greg Sánchez estaba a cargo

Desde políticos hasta un simpatizante del EZLN eran espiados en Cancún

Al menos 11 personas de la dirección de seguridad municipal de seguridad pública trabajaban en la intercepción de llamadas y mensajes SMS

Se encontraron las grabaciones de 13 pláticas

Foto
Propiedad de José Manuel Vera Salinas –ex director de Seguridad Pública de Oaxaca y ex asesor del alcalde con licencia de Cancún, Gregorio Sánchez–Foto José Luis López Soto
Foto
Otra propiedad de José Manuel Vera Salinas –ex director de Seguridad Pública de Oaxaca y ex asesor del alcalde con licencia de Cancún, Gregorio Sánchez–, donde el Ejército Mexicano encontró equipo para intercepción de llamadas telefónicasFoto José Luis López Soto
Foto
José Manuel Vera Salinas, presunto operador de la red de espionaje que operaba en CancúnFoto José Luis López Soto
Corresponsal y reportero
Periódico La Jornada
Lunes 21 de junio de 2010, p. 39

Las investigaciones que realiza la Procuraduría General de la República (PGR) en Quintana Roo para encontrar a los responsables de intervenir llamadas telefónicas del gobernador de esa entidad, Félix González Canto, apuntan a José Manuel Vera Salinas, ex director de Seguridad Pública de Oaxaca y ex asesor de seguridad del alcalde con licencia de Benito Juárez (Cancún), Gregorio Sánchez Martínez, hoy preso por presuntos nexos con el crimen organizado.

Las pesquisas señalan a Vera Salinas como encargado de operar un centro de espionaje que se instaló hace por lo menos un año en ese municipio.

Documentos ministeriales y judiciales en poder de La Jornada muestran las raíces y el alcance del equipo de espías que operaban en dos casas ubicadas en Cancún, desde donde se intervenían los teléfonos de políticos de todos los partidos, funcionarios públicos estatales y municipales, empresarios, periodistas, activistas sociales y hasta un representante del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

De acuerdo con la averiguación PGR/QROO/CAN/193/2010, Vera Salinas tenía a su cargo 11 personas comisionadas por la propia dirección de seguridad pública municipal para realizar labores de espionaje.

Desde hace dos semanas, ante el temor de que la PGR solicite una orden de aprehensión en su contra por el delito federal de intervención de comunicaciones privadas, Vera Salinas solicitó un amparo ante un juzgado de distrito en la ciudad de México contra cualquier medida cautelar que implique su arresto.

El 22 de abril, en Cancún, el gobernador Félix González y su procurador de Justicia, Francisco Alor, revelaron en entrevista que empresarios, políticos y periodistas han presentados denuncias por espionaje ante la delegación de la PGR en la entidad.

González expuso: El gobierno del estado interpuso una denuncia ante la PGR como agraviado por espionaje, al igual que muchos ciudadanos, empresarios, líderes de opinión y periodistas, principalmente. Mientras, Alor confirmó que las querellas se interpusieron luego de que el Ejército Mexicano descubrió el 14 de abril dos casas en Cancún desde donde se realizaba la intervención de comunicaciones privadas.

La Jornada tuvo acceso al expediente 316/2010 y a las constancias de la averiguación previa PGR/CAN/193/2010, abierta a partir de las denuncias penales presentadas por el gobernador de Quintana Roo y por otras personas que aseguran haber sido víctimas de espionaje telefónico.

Entre los documentos destaca el oficio DGPPTYB/DA/CI//2010 que encontró la Policía Federal Ministerial de la PGR, fechado el 17 de febrero. Está dirigido a Vera Salinas y firmado por Julio César Espinoza Valente, en esa fecha director administrativo de la secretaría municipal de seguridad pública.

Espinoza solicita a Vera Salinas todos los informes confidenciales acerca del personal que le fue asignado a la dirección administrativa de la secretaría municipal de seguridad pública, las condiciones en que se encuentra el vehículo matrícula 5047 y los ocho teléfonos Nextel que se encuentran bajo su resguardo. El oficio viene acompañado de copias simples donde se asientan los resguardos de los equipos.

Además, la PGR tiene en su poder un documento titulado Lista de personal a cargo, donde aparecen los nombres, números de cobro y compensaciones que corresponden a cada uno de los 11 comisionados al centro de espionaje que encabezó Vera Salinas. Esos datos están corroborados con decenas de comprobantes de depósitos bancarios.

La autoridad federal encontró también un oficio de tres hojas titulado Requerimientos de oficinas en Cozumel, otro similar sobre Benito Juárez y un tercero que detalla los gastos de capacitación. Todos están firmados por Vera Salinas.

La PGR también analiza documentos que tienen que ver con la situación política de Quintana Roo e incluyen listas de personas cuyos teléfonos celulares y fijos fueron intervenidos. Entre los espiados estaban el gobernador de Quintana Roo, periodistas, todos los regidores de Cancún, diputados locales y federales que representan el distrito de esa entidad, líderes estatales de todos los partidos y varios dirigentes sociales, entre ellos Jacinto Robles Pérez, del movimiento del EZLN en Cancún.

Hay también un documento denominado Directorio del personal que trabaja en el proyecto RB, en clara referencia al hoy candidato del PRI a la gubernatura, Roberto Borge.

La autoridad federal descubrió al menos 19 rosetas conectadas a la red de Telmex, cada una con el nombre del espiado. Algunas tenían conectadas grabadoras.

Los espías elaboraban redes de vínculos en los que monitoreaban las llamadas realizadas por diversos personajes, detallando el nombre de la persona a la cual se marcaba, puesto o cargo, día de la llamada, número telefónico, la frecuencia de los telefonemas y el domicilio de las personas a las que se llamaba.

La PGR se incautó de 55 discos compactos y analizó el disco duro de una computadora, donde se encontraron 240 archivos de audio con 13 conversaciones telefónicas grabadas.

También confiscó 12 grabadoras tipo pluma y un equipo que sirve para intervenir y monitorear conversaciones telefónicas y mensajes de texto.

Además, los investigadores descubrieron una camioneta equipada con sistemas de intervención telefónica.

Uno de los lugares cateados estaba a cargo de Juan Ramírez, quien, según los dictámenes de grafoscopía, escribía a mano las transcripciones de las pláticas.