El primer vocal del consejo general de vigilancia y justicia del sindicato minero, Juan Luis Zúñiga Velázquez, pidió licencia definitiva para separarse del cargo –por razones de salud–, lo cual de ninguna manera, significa una ruptura con el gremio que dirige Napoleón Gómez Urrutia.

Zúñiga Velázquez, quien fue uno de los brazos operadores importantes de Gómez Urrutia, declaró que no ha formado ni formará parte de ninguna conspiración contra el sindicato, y ratificó su lealtad absoluta y adhesión firme a las luchas que el sindicato lleva a cabo contra los enemigos del sector minero.

Procedente de la sección 200 de Ciudad Sahagún, Hidalgo, Zúñiga Velázquez ocupó diversos cargos directivos. Informó que se separa estrictamente con el fin de atender su salud.

Por la lealtad y adhesión que le tengo al Sindicato Nacional de Mineros, declaro que no he formado ni formo ni formaré parte de ninguna conspiración contra el sindicato ni contra el compañero Napoleón Gómez Urrutia (...) ni militaré en ningún intento por dividir o debilitar a esta organización, así como tampoco para convalidar las calumnias y maniobras que desenvuelven elementos desleales que traicionan a nuestro sindicato, quienes nos calumnian por instrucciones de las empresas a las cuales se han vendido rastreramente, creando una falsa idea de ruptura en nuestras filas.